La senadora Zenaida Delgado llegó al Congreso como representante de Cruzada Nacional, pero poco después se pasó al bando del Partido Colorado y abrazó al titular Horacio Cartes en varios eventos proselitistas. ABC Color accedió a documentos que comprueban que la parlamentaria fue destituida del Poder Judicial por planillera en el año 2004 y previamente tuvo al menos dos suspensiones sin goce de sueldo.
Según la resolución N° 183/2004 del Consejo de Superintendencia de la Corte Suprema de Justicia, dicha institución resolvió cesarla de sus funciones como asistente del Centro de Procesamiento de Datos Estadísticos.
El documento detalla primeramente que en marzo del año 1996 había sido sumariada por haber incurrido en llegadas tardías en más de cinco ocasiones. En esa ocasión aseguró que “comunicó a su hermano y por error involuntario” recién entregó el certificado en diciembre.
Años más tarde, en 2013, registró también casi una semana de ausencia sin ningún tipo de justificación y en otras dos ocasiones, en el año 2000 y 2001, fue suspendida sin goce de sueldo por faltas similares.
Es decir, acumuló dos suspensiones sin goce de sueldo y luego, por no presentarse a trabajar finalmente, la institución resolvió destituir a la hoy senadora en junio del 2004. La resolución fue firmada por el entonces presidente Víctor Núñez y los ministros Sindulfo Blanco y José Raúl Torres Kirmser.
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Norma Aquino: más de 200 ausencias injustificadas y múltiples apercibimientos
La senadora Norma Beatriz Aquino Luragui, autodenominada “Yami Nal” durante toda su campaña como representante de Cruzada Nacional, también tiene un cuestionable pasado dentro de la función pública. Según su extenso legajo, ingresó a la Corte Suprema de Justicia en 1992 y estuvo comisionada a otras instituciones desde el 2011 hasta el 2013, cuando se reincorporó.
Entre su lista de sumarios se encuentra que fue asistente administrativa y estuvo comisionada a la Cámara de Diputados desde el 2 de enero hasta el 30 de junio del 2003, cuando se desempeñaba como asesora del entonces parlamentario Mario Morel Pintos. En ese periodo se le abrió un sumario por “supuestas irregularidades en el desempeño de sus funciones” y la Superintendencia resolvió un apercibimiento con constancia en su legajo.
En ese sumario se señaló que tuvo varias denuncias previas por el incumplimiento de sus funciones y ya fue advertida de que se tomarían las medidas disciplinarias correspondientes. Pese a ello y a otro incumplimiento más, no fue destituida y solo le dieron un apercibimiento.
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Años después, en el 2017, se volvió a abrir otro sumario administrativo por “supuesto abandono de cargo” entre febrero y agosto del 2014. En la resolución N° 32 se indicó que Norma Aquino se reintegró en agosto del 2014 con un cargo en la Auditoría de Gestión Judicial.
De acuerdo a ese documento, en cinco meses registró un total de 142 ausencias entre febrero y julio del 2014. Según el listado, la hoy senadora se ausentó al menos 20 días cada mes, sin justificación. Pese a ello, siguió cobrando cada mes más de G. 4 millones, entre salarios y bonificaciones.
La parlamentaria alegó que estaba prestando servicios en la oficina del entonces diputado Óscar Luis Tuma y que había solicitado la prórroga de su comisionamiento, pero presentó los pedidos sin el sello de la mesa de entrada, solo con la firma de la entonces directora de Recursos Humanos.
Además, Recursos Humanos del mismo Congreso Nacional indicó que el comisionamiento ya terminó en el 2013, por lo que no podía remitir planillas de asistencia del 2014.
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Además, se sumaron al expediente más planillas para demostrar la baja asistencia entre febrero y julio del 2015, meses en los que faltó en 86 ocasiones y sumó varias llegadas tardías. Según los datos del Poder Judicial, recibió su salario íntegro por varios meses y, luego, pese a sumarios y ausencias, recibió bonificaciones y gratificaciones.
En esa ocasión, la parlamentaria alegó que durante ese periodo ella pidió permiso sin goce de sueldo, pero presentó como pruebas formularios que nunca fueron presentados ante mesa de entrada, por lo tanto, no se le dio trámite a esa solicitud.
Luego de todos esos expedientes, en el 2016 fue nuevamente sancionada y se le aplicó una multa de cinco jornales mínimos. A pesar de todo eso, Aquino solicitó el permiso sin goce de sueldo en cuatro ocasiones seguidas y, a la quinta, finalmente, la Corte Suprema, a cargo de Alicia Pucheta, Miryam Peña y Raúl Torres Kimser, denegó la solicitud y oficialmente Aquino dejó de formar parte de la institución.
Los “antecedentes” de las senadoras
Norma Aquino y Zenaida Delgado son dos de las parlamentarias que entraron al Congreso por Cruzada Nacional, pero luego se pasaron al cartismo, para “estar mejor”. Además, desde que asumieron se vieron envueltas en varios escándalos.
Aquino, por ejemplo, llegó a ser favorecida por el subsidio del Estado para personas vulnerables en pandemia. Sin embargo, años después, en su declaración jurada presentada al asumir como senadora, reportó un patrimonio neto de más de G. 1.070 millones.
En redes sociales, se dedicó a bloquear a las personas que le cuestionaban por sumarse al Partido Colorado, pese a que durante toda su campaña se dedicó a atacar a Horacio Cartes. Durante la última Convención de la ANR no solo estuvo presente, sino que cantó la polca colorada.
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Mientras tanto, Zenaida Delgado acumuló otros escándalos. El más reciente fue el uso de un minibús del Congreso para un viaje con su pareja hasta la localidad de Tacuatí. La misma parlamentaria confirmó que decidió usar el vehículo pese a que tenía problemas mecánicos y, al llegar a la ciudad de San Pedro, se incendió.
Días después, el intendente de Tacuatí confirmó que cada fin de semana Delgado viaja a la ciudad con su novio, en el móvil del Congreso y con combustible gratis.
Por otro lado, además de sumarse al coloradismo, adquirió las viejas prácticas, pues ubicó a gente de su entorno dentro de la función pública. Les dio cargos a su sobrino, la hermana y otra familiar cercana de su novio.
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