Los metadatos del documento digital remitido por el Ejecutivo y el propio presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre (ANR, cartista), confirman que en la elaboración de la propuesta de modificación del proyecto de ley, “que establece el control, la transparencia y la rendición de cuentas de las organizaciones sin fines de lucro”, intervino hasta el asesor jurídico del Senado, Sergio Godoy, quién ya no debería tener injerencia en el trámite en Cámara Baja,
El documento, remitido como “borrador” a varios legisladores, tiene como autor del archivo a Miguel Godoy, y como colaboradores a la secretaria ejecutiva de la Unidad de Gestión de la Presidencia de la República, Marianna Saldívar Gadea (exfuncionaria del extinto Grupo Cartes), y a José Emilio Garayo Olmedo, funcionario del Gabinete Civil de la Presidencia.
“También formó parte de este trabajo el asesor jurídico de la Cámara de Senadores –que fue la cámara de origen– el abogado Sergio Godoy, los ministros Gustavo Villate (Mitic), (Roberto) Ilo Moreno, el mismo vicepresidente de la República (Pedro Alliana)”, había reconocido por motu proprio el presidente de Diputados, aunque este se contradijo con la presidenta de la Comisión de Presupuesto, diputada cartista Cristina Villalba, cuyo dictamen se usó de base para el tratamiento.
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Sergio Godoy “no es asesor nuestro”
“Él (Sergio Godoy) no es asesor nuestro, nosotros estamos rodeados aquí de nuestros asesores”, dijo Villalba ayer ante la consulta específica, contradiciendo a Latorre.
El hecho cuestionable es que Godoy ya no debería tener intervención formal, puesto que el proyecto ya pasó del Senado, sumado a que, realmente, las sugerencias en ningún momento ingresaron formalmente como un expediente en la Cámara Baja.
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Con esto, se impidió el acceso a los diputados disidentes a las propuestas de reformas, hasta al menos una hora antes del inicio de la sesión ordinaria pasada.
El oscuro tratamiento de las reformas se ven aún más enturbiadas por los dichos de Leite, quien además de tildar de “boludeces” las sugerencias de Peña, reconoció haber recibido un mandato imperativo al decir que intentaron plantarse, pero “ya sabés gracias a quien torcimos el brazo”.