Tras un prolongado debate, el pleno de la Cámara Alta aprobó la versión de la Cámara de Diputados del Proyecto de Ley “Que establece la pensión universal para las personas adultas mayores y dispone beneficios de acceso e inclusión”. Se encargará del programa el Ministerio de Desarrollo Social, cuyo titular es Tadeo Rojas, ministro que lleva centralizando varios programas sociales en el gobierno de Santiago Peña.
Voceros de comisiones indicaron que se establece un monto no menor al 25% del salario mínimo (G. 700.000) con el fin de llegar a unas 210.000 personas faltantes, que cumplan 65 años y abarcar el 100% de este sector en un plazo de tres años. El principal objetivo era eliminar los cuestionados “censos” politizados, indicaron.
Esperanza Martínez (FG) felicitó a las organizaciones de adultos mayores y recalcó que este proyecto solo demuestra el fracaso de 50 años de la seguridad social en Paraguay que nunca pasó del 26%. Agregó que el Instituto de Previsión Social (IPS) actualmente se cae a pedazos por la corrupción.
No es sostenible, advierten
Yolanda Paredes (CN), una de las proyectistas, dijo que los G. 650.000 que actualmente cobran ahora los adultos mayores no alcanza para nada ante el precio de los alimentos.
Ever Villalba (PLRA) dijo que cuando un proyecto tiene éxito hay muchos “padres”, pero que la iniciativa siempre fue propuesta del Poder Legislativo, no del Poder Ejecutivo.
Salyn Buzarquis (PLRA) pidió “no mentir a la gente” ya que el proyecto señala que los pagos estarán condicionados a la disposición presupuestaria y que los fondos no están blindados.
Derlis Osorio (ANR, aliado cartista) advirtió que esto no tendrá sentido y que el país corre el riesgo de terminar como Argentina si no se hace una reforma del sistema de pensiones ya que el sistema no es sostenible con miles de personas cumpliendo 65 años cada año.