“Lujosa e imponente casa de dos pisos, zona Club Sirio, dos livings, cocina amoblada, muebles Florense, placares en todas las habitaciones, tres habitaciones en suite para dos personas, puertas con revestimiento de trébol, tejas Loma Negra importadas, dos terrazas imponentes, pisos de madera, piscina, quincho, garaje.
Precio US$ 350.000 (unos G. 2.500 millones en ese entonces)”, resalta un anuncio del 2019 en una página inmobiliaria denominada Jóvenes inmobiliarios del Paraguay.
Esta casa ubicada en el barrio Felicidad de Lambaré, es la misma que compró la senadora cartista, Lizarella Valiente por US$ 100.000 que incluso fue mejorada tras su compra.
Lizarella y la contradicción
Una nueva contradicción surge ahora, luego de que la misma parlamentaria haya dicho a la 1080 AM, que las mejoras de la imponente residencia las realizaron los anteriores dueños. Estas declaraciones fueron rápidamente desmentidas en la misma radioemisora por el abogado Víctor Peña Gamba, anterior dueño, quien a su vez confirmó que vendió la casa a la actual senadora.
“Ellos hicieron las mejoras de la casa, yo no hice. La casa tiene mejoras actualmente, eso es categórico”, expuso el exdueño de la actual casa de Lizarella Valiente y Óscar Rodríguez.
Lizarella pagaba mucho más
La legisladora detalló que la transacción de la casa cerró en octubre de 2019 por US$ 100.000, alrededor de G. 650 millones a la cotización de entonces. Entregó US$ 20.000 (en efectivo), mientras que el saldo, según Valiente, lo fraccionó en 60 cuotas de US$ 1.736, unos G. 11 millones de aquel tiempo.
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Siendo funcionaria de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), la actual legisladora tenía un salario bruto mensual de G. 7.600.000, mientras que el neto era de G. 6.916.000 al mes. Es decir, la cuota por la compra de la casa era casi el doble de su salario.
Más deudas de Lizarella
La senadora cartista al parecer hace magia en sus finanzas, porque para su campaña electoral para ser senadora, asumió un nuevo préstamo de G. 72.000.000, esta vez del banco Basa, con una cuota mensual que supera los G. 4.000.000.
Según sus propias Declaraciones Juradas (DD.JJ.) la senadora cartista en su época de funcionaria de la Dinac, pagaba de forma mensual G. 18.323.200 con un salario de G. 7.600.000.
“Regalos de mi madre. Nenecho también me ayudó un poco”, fue el argumentó en su momento para tratar de justificar las millonarias inversiones que realizaba.
En el caso de su marido, el intendente de Asunción no presentó hasta ahora ninguna factura que demuestre el destino final de los G. 500.000 millones en bonos que debían utilizarse en obras.