Para lograr su objetivo de acaparar todos los puestos de poder posibles y quebrantar la institucionalidad estatal, el oficialismo colorado “fichó” a numerosos senadores que abandonaron los partidos Cruzada Nacional, Patria Querida y Hagamos así como del movimiento de ANR Fuerza Republicana. Algunos se instalaron en el cartismo en forma oficial y otros simulan ser “independientes”, pero coquetean siempre con aquel grupo.
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En ese contexto están los colorados, otrora de Fuerza Republicana, pero ahora fieles al cartismo como Derlis Osorio, Mario Varela (quien incluso fue ministro de Mario Abdo Benítez); Javier Zacarías Irún y Natalicio Chase. Este último fue presidente de la Essap en la administración anterior y ahora es jefe de la bancada cartista en el Senado.
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También está el senador Carlos Núñez Agüero, quien cual camaleón se ubica de acuerdo al gobierno de turno. En 2023 abandonó Fuerza Republicana y pasó a Honor Colorado para apoyar una polémica ley de reforma de la Policía en la que intentó beneficiar a la cooperativa que preside. En 2018 había dejado el cartismo para trabajar con Mario Abdo Benítez.
Los “opositores”
Los que estafaron al electorado al ingresar al Senado con voto opositor pero rápidamente pasaron al cartismo son: Zenaida Delgado, siendo residente en España ingresó al Senado por el partido Cruzada Nacional prometiendo reivindicar a los migrantes, pero ni bien llegó, fichó al cartismo; Norma Aquino alias Yamy Nal”, abandonó Cruzada Nacional para afiliarse a la ANR y ser servil al cartismo; y Javier Vera alias Chaqueñito (ex-CN) fue fichado incluso antes de jurar, por el cartismo.
Además, Orlando Penner (ex-PPQ) abandonó su partido supuestamente a cambio de un acueducto para el Chaco, y por último Patrick Kemper (ex-Hagamos) pasó al oficialismo, quien es el senador menos votado del periodo.