Luego de las elecciones en diciembre de 1991 para los miembros de la Convención Nacional Constituyente, fue el 20 de junio de 1992 - un día como hoy pero hace 32 años- que la Constitución Nacional fue promulgada y hasta ahora permanece vigente en toda la República del Paraguay.
Al respecto, el abogado constitucionalista Emilio Camacho recuerda que esta Carta Magna se dio luego de “superar una larga dictadura” y ante la existencia de una “presión unánime” para una nueva constitución.
“Hubo un consenso muy grande y participaron todos los partidos o movimientos políticos anotados; la Constitución del 92 nace con gran legitimidad y luego de 6 a 8 meses de debate”, detalló.
Asimismo menciona que esta constitución es “la más democrática de todas” ya que se realizó con la participación de varios sectores u organizaciones y todas con la “plena libertad de condiciones y en soberanía de la sociedad”.
Constitución del 92 tuvo “puntos de confrontación”
Durante el debate para la nueva Constitución, Camacho sostiene que hubo distintos “puntos de confrontación” y uno de los principales fue la reelección.
“Hubo puntos de confrontación con el Poder Ejecutivo del general Andrés Rodríguez, especialmente en la cláusula de la reelección y candidatura de parientes; por eso nació la senaduría vitalicia como el reconocimiento y se prohibió totalmente la reelección”, agregó.
Agrega que entre casi 200 constituyentes se llegó a una “constitución enorme” que a lo largo de su historia sufrió “violaciones fragantes” y acumula “muchos golpes” pero aún permanece como “parte de la lucha de los derechos luego de salir de la dictadura”.
“Esta Constitución fue la primera en un ambiente real de libertad y democracia; la Constitución Nacional paraguaya resistió y continúa vigente como hace 30 años”, enfatizó.
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Constitución Nacional en la actualidad
Sobre la Constitución Nacional de 1992, la directora de Semillas por la Democracia, Marta Ferrara, sostuvo que sus avances más importantes en comparación a las anteriores fueron “la libertad de expresión la libertad de prensa la libertad de reunión, las libertades políticas” incluso con un “diseño” que correspondía a ese tiempo y permanece vigente.
“Un punto fundamental es el capítulo de pueblos indígenas que es un ejemplo a nivel regional; en cuanto a las tareas pendientes yo creo que el gran desafío que tenemos por delante es la lucha contra la corrupción y fundamentalmente a la independencia de los poderes”, agregó.
Sostiene que otro aspecto en el contexto actual es que se necesita de un “Poder Judicial fuerte e independiente que no responda a los Gobiernos de turno ni en la clase política”, algo que también se debería extender a órganos como el Consejo de la Magistratura o el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados para tener una “justicia libre que defienda a todos los ciudadanos y ciudadanas por igual”.
“En el marco de la lucha contra la corrupción y la desigualdad está entre los retos pendientes el sistema de equilibrio e interdependencia de los Poderes del Estado; la independencia total del Poder Judicial que en este momento está avasallada por el poder político y no da ninguna garantía de imparcialidad, ni de equidad en su fallos”, agregan desde asociación civil.
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