El diputado Mauricio Espínola analizó el hecho de que ayer Santiago Peña fuera a la Junta de Gobierno para rendir cuentas ante Horacio Cartes y manifestó que se trató de un “acto simbólico de ir a besar el anillo del patrón”.
“Se entiende la lógica natural del oficialismo, la liturgia política, el oficio de poder que posee el Partido Colorado a lo largo de su historia”, indicó.
Agregó que no existió una validación previa o un debate de los temas que el Presidente presentó en la Junta de Gobierno, que fue “un acto simbólico de ir a besar el anillo del patrón”.
Criticó que muchos pretendían presentar inquietudes y preocupaciones, pero que fue censurada la lista de oradores.
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Control al poder
También señaló que el trabajo de los disidentes es el control al poder, monitorear, cuestionar y contrarrestar el ejercicio del poder oficial.
“Es importante que exista la confrontación al interior del Partido Colorado”, insistió.
Finalmente, dijo que algo que degrada la figura de un Presidente es la defensa a la acusación de un integrante de un Poder del Estado.