Si bien el proyecto de ley no asigna recursos extraordinarios como suele ser en estos casos, sí faculta al “Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, Ministerio de Agricultura y Ganadería, Gobernación y municipios del Departamento Ñeembucú, a destinar los recursos presupuestarios necesarios para mitigar los efectos de las inundaciones en todo el departamento, resguardar a la población afectada e iniciar programas tendientes a la recuperación de sus medios de vida”.
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El diputado ñeembuqueño Diosnel Aguilera (PLRA, C) fue el principal impulsor de la iniciativa, pese a que la otra legisladora departamental es nada más y nada menos que la esposa del vicepresidente de la República, Pedro Alliana, la diputada Fabiana Souto (ANR, HC), quien desde que asumió la banca como suplente del actual director de Yacyretá, Luis Benítez, no emitió palabra alguna ante el pleno.
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Aguilera enfatizó que otro aspecto importante de la declaración de emergencia se refiere al impulso de planes para refinanciar créditos a los productores (principalmente ganaderos) que se ven afectados por las inundaciones.
“Establécese que el Banco Central del Paraguay, el Banco Nacional de Fomento y el Instituto Nacional de Cooperativismo, dentro de sus facultades, dispongan como medida excepcional durante la vigencia de la declaración de emergencia, la refinanciación o reestructuración de deudas contraídas (capital e intereses), con entidades financieras y cooperativas, que no puedan ser honradas por la pérdida de la producción como consecuencia de los efectos ocasionados por la inundación, a favor de los habitantes del departamento de Ñeembucú”, indica en dicho sentido el artículo 3º