Unión Europea: repudian la campaña cartista de usar a niños y meter miedo a las familias

Tras archivarse la derogación del convenio con la Unión Europea (UE), que creen fue blanco de una “campaña de miedo” del cartismo para captar votos y erigirse como “superhéroes”, el temor es que ahora sigan mintiendo y tergiversando, alertó la diputada Johanna Ortega (PPS). Lamentó que se esté jugando con el futuro de los niños.

Los ministros Enrique Riera (i), Ángel Barchini y Luis Ramírez (d) y el diputado Raúl Latorre.Gentileza
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“Se evidencia ante la ciudadanía -y espero que tomen nota- de que esto fue nada más y nada menos que una artimaña electoral para engañar a los electores, para crear un miedo sobre un fantasma que nunca existió y en base a esos miedos mover a la ciudadanía a las urnas”, consideró la diputada Johanna Ortega (Partido País Solidario). Fue tras el cambio del postura de una mayoría de Honor Colorado que archivó su propio proyecto de derogación del convenio de cooperación de la Unión Europea con nuestro país, para la educación.

No obstante, la legisladora alertó que, pese a quedar expuesto de que nunca fueron los “defensores de la moral y las tradiciones” que decían ser, el cartismo, ahora en función de gobierno, pretende seguir “mintiendo y tergiversando” para recuperar apoyo. Agregó que es algo grave, porque se juega con el futuro de los niños.

“En campaña, Santiago Peña dijo que la ANR es el mejor techo para proteger al país de la ‘ideología de género’, para proteger a las familias paraguayas, los valores etc., pero, lo que en realidad hacen, es usar al Estado y el poder que tienen para desinformar, mentir y tergiversar los datos de la ciencia y de la realidad”, reclamó.

La legisladora incluso remarcó que, como paraguaya y católica, pero que ocupa un cargo de elección popular, defiende la libertad religiosa consagrada en la Constitución Nacional. En contrapartida, tampoco puede avalar que desde el Estado se pretendan imponer en escuelas públicas cuestiones que van contra la ciencia y se ponga en riesgo a los niños.

Esto, en relación a materiales “educativos” difundidos por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) con “cero cientificidad”. “La educación sexual no implica que vamos a enseñarle a los niños que van a tener relaciones homosexuales o heterosexuales, se trata de enseñarles cómo cuidarse para evitar embarazos no deseados, para evitar contagio de enfermedades de transmisión sexual, pero, sobre todo, como identificar y prevenir casos de abuso”, afirmó.

La diputada Johanna Ortega (País Solidario) durante una de las sesiones de Diputados. A su espalda, el diputado Rubén Rubin (Partido Hagamos).

Ortega dijo que solo basta ver las cifras en nuestro país, como el hecho de que casi 5.000 mujeres entre 15 y 24 años contraen la infección por el VIH (Virus de Inmunodeficiencia Humana) en Paraguay o las cifras de abuso de menores, para entender que no se puede estar poniendo en riesgo a nuestros niños y adolescentes por cuestiones electorales.

“Esas son cosas que una educación sexual integral, desde el ámbito de la educación debe enseñar, que en ninguna instancia, incluso en la familiar que suele ser más frecuente, pueden ser abusados. El resto son fantasmas que tratan de instalar miedos y luego erigirse como grandes superhéroes de esta historia, y no es así, lo que estamos poniendo en riesgo es el futuro de muchos niños y adolescentes y tenemos que tocar este tema seriamente”, refirió.

Tras reculada sobre convenio con Unión Europea, la oración

Luego de la reculada del cartismo en relación al convenio con la Unión Europea sobre apoyo a la educación, varias autoridades del Ejecutivo y Legislativo se mostraron públicamente con un sector religioso en particular.

Ayer, el presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre (ANR, HC), recibió en la Cámara Baja a la pastora Bethany Abreu. El jueves, estuvo junto a los ministros Enrique Riera (Interior); Ángel Barchini (Justicia); Luis Ramírez (Educación) y Walter Gutiérrez (Niñez y Adolescencia) de un desayuno de oración.

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