Dijo que estamos a pocos pasos de volver a las desapariciones stronistas al señalar que la diputada Rocío Abed (ANR, HC), a quien llamó “la cacatúa”, amenazó de muerte a otro colega y que el diputado Yamil Esgaib (ANR, HC), a quien llamó “Gargamel”, prácticamente confirmaron que vivimos en una dictadura donde se puede amenazar a un fiscal general.
Citando al alemán Georg Lichtenberg (1742-1799) sostuvo que “cuando los que mandan pierden la vergüenza, los que obedecemos tenemos la obligación de perderles el respeto”.
Reiteró que desde el cartismo se están dando indicios de amenazas gansteriles en la política que va más allá de reivindicar la postura retardataria del estronismo de cuando se decía que en “democracia manda la mayoría”.
Sostuvo que se está instalando un discurso de odio, y llamados a la muerte. “Estamos pisando un terreno donde ya no se vuelve”, dijo al advertir que esto dejará de ser discurso y pasará a ser consignas de asesinos, violencia e instigación al crimen. Repudió que el cartismo no tenga reparo en lanzar amenazas de muerte reinaugurando la era de las desapariciones mediante mensajes de revanchismo, odio, venganza y persecución a todos los que no sean sus hurreros.
Califican de disparate que se engañó a EE.UU y a Brasil
El senador Rafael Filizzola (PDP) calificó ayer de “disparate” la denuncia de Horacio Cartes porque su hipótesis es que “algunos legisladores y funcionarios” tuvieron la influencia para determinar la política exterior de Estados Unidos y Brasil. “En lugar de denunciarles, hay que mandarlos al Ministerio de Relaciones de Exteriores si son tan influyentes”, se burló.
No obstante, dijo que la denuncia fue bien pensada para que sea un “apriete” y una amenaza a los que critican al gobierno entrante y a Cartes. “Es un intento de amedrentar a la oposición”, aseveró.
Filizzola dijo que estas conductas no son nuevas, sino propias del gobierno de Cartes del 2013 al 2018 cuando ordenó leyes especiales y terminó con la policía ametrallando la sede del PLRA en el más concreto caso de terrorismo de Estado en toda la democracia.
Agregó que también se observa esto con el proyecto de ley que pretende autorizar al Poder Ejecutivo a gobernar por decreto en lugar de tener autorización del Legislativo.
Filizzola dijo que Cartes está jugando con la paciencia del pueblo que ya defendió la democracia en 1996 (Caso Oviedo), en 1999 (Marzo Paraguayo) y en 2017 (la enmienda de Sangre).
Admitió que los opositores se merecen “todas las plagas bíblicas por no poder unirnos” y dijo que la amenaza de Juicio Político no es una “patente de corso”.
Lo chantajean a Rolón o lo sacan, dice Paredes
“El cartismo se cree, y es absolutamente dueño del poder en los tres poderes del Estado. Por eso no escatiman palabras ni acciones. No dudo que puedan sacarle, o en todo caso, chantajear a Emiliano Rolón (fiscal general del Estado) a efecto que haga lo que ellos quieren”. Así lo señaló ayer la senadora Yolanda Paredes (Cruzada Nacional), antes de la sesión del Senado, en alusión a la amenaza lanzada por el diputado colorado cartista Yamil Esgaib contra el titular del Ministerio Público.
Apuntó que dicha amenaza forma parte de “la venganza de Cartes contra los jueces y fiscales que quisieron hacer bien su trabajo”. “Desde el momento en que el cartismo tomó la posesión de los tres poderes del Estado, estamos fritos en Paraguay”, aseveró.
La senadora opositora añadió que los cartistas también quieren vengarse del presidente saliente Mario Abdo Benítez, pero en ese caso mucho no pueden hacer, ya que el jefe de Estado “sabe muchas cosas de ellos. “¿Hasta dónde se animarán a ir en contra de Abdo si él es cómplice?”, se preguntó la congresista.
Paredes advirtió que todos aquellos que mencionaron a Horacio Cartes, ya sea en denuncias, etcétera, “ahora serán perseguidos desde los tres poderes del Estado”.
También repudió que el condenado Darío Messer ahora pida recuperar sus bienes en Paraguay ya que el cartismo tiene el control del Poder Judicial.