Los agredidos fueron Thomás Fabián Rivas Aranda (34), del barrio Santa Teresita, y Cristofher Stiven González Bogarín (29), domiciliado en el barrio San José, quienes se encontraban retirando propaganda electoral de la vía pública. Estos denunciaron ante la comisaría local que fueron víctimas de un supuesto hecho de “Coacción grave” por parte de un grupo de siete personas, de las cuales algunas fueron identificadas.
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En la denuncia realizada por los afectados mencionan como uno de los agresores a Gilberto Báez, mayor de edad, domiciliado en el barrio Sagrado Corazón de Jesús, y un hermano menor de este. Otro de los implicados fue individualizado como Wilson Giménez, mayor de edad, además de otras cuatro personas más, quienes estaban a bordo de una camioneta de la marca Mitsubishi.
El ofuscado grupo agresor, en vez de ayudar a recibir una Navidad con calles limpias, libres de todo tipo de propaganda electoral, obligó a los dos solitarios jóvenes a retirarse. Estos estaban esperando a otro grupo de voluntarios –que fueron autoconvocados por las redes sociales-para retirar la propaganda electoral– y que también fueron agredidos de manera brutal.
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A esta altura ya no tenía razón alguna que la propaganda electoral continúe ensuciando las avenidas de los municipios, y tendría que haber sido la misma Municipalidad la encargada de retirar los carteles.
Pero ante la inacción de las autoridades, un grupo de jóvenes inadaptados de este distrito, con prepotencia y que habían quedado dolidos con la derrota de María del Carmen Benítez para la Gobernación, además de Tomás Ever Rivas para la presidencia de la seccional colorada local, no encontraron mejor forma de desquitarse que descargar su furia contra los dos jóvenes que solo querían dar un aspecto diferente a la ciudad para las fiestas de fin de año.
El afectado Rivas Aranda dijo que recibió golpes de puño y patadas, mientras que a su amigo González Bogarín, quien se encontraba arriba bajando los carteles, le patearon, echando la escalera al suelo y ahí comenzaron a propinarle patadas.
Ambos fueron agredidos e incluso amenazados de muerte con arma de fuego, por lo que optaron por retirarse y radicaron la denuncia correspondiente. El caso ya fue comunicado al Ministerio Público.