Minutos antes del llamado a la primera convocatoria de Diputados, prevista para las 08:30, el diputado Pastor Vera Bejarano, líder de la bancada “C” del PLRA, uno de los diputados que dieron quórum el lunes pasado para archivar el juicio político contra la fiscala Sandra Quiñónez, señaló que solicitará el tratamiento del nuevo pedido de enjuiciamiento para la próxima semana.
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Vera Bejarano debía formular en el estadio de mociones de preferencia. Sin embargo, al quedar sin quórum el planteamiento pasa a la etapa de indefinición. El diputado Sebastián García (PPQ) califica de una “tomadura de pelo” la supuesta confusión de los 18 liberales que permanecieron en sala, cuando el plan de la mayoría de los opositores era dejar sin quórum la sesión.
El presidente de Diputados, Carlos María López (PLRA), antes de levantar la sesión por falta de quórum, había señalado que iba a poner a consideración del pleno el nuevo pedido de juicio político, ya sea para rechazar, ir a comisiones o analizarlo. “La mayoría es la que va a decidir”, había señalado.
Para el diputado cartista Tadeo Rojas (precandidato a gobernador de Central), la presentación del nuevo libelo acusatorio es irresponsable, violatorio de la Constitución y una falta de respeto a la institucionalidad.
Tras la denuncia del presidente de la República, Mario Abdo Benítez, de un supuesto soborno de US$ 250.000 a diputados, el cartista Pedro Alliana (precandidato a vicepresidente de la República) negó el hecho.
Se repite la historia, faltan tres votos
Para la aprobación de la acusación del nuevo pedido de juicio político contra Quiñónez, los diputados a favor llegan a 43 votos, en el que se incluye al acusado Miguel Cuevas (precandidato a senador oficialista) y a los otros cinco “arrepentidos” liberales. Sumado los votos, tienen el control de la Cámara Baja pero no así para reunir la mayoría de dos tercios de los presentes para aprobar el juicio político (53 si están los 80). Esto teniendo en cuenta que sólo cinco de los 18 liberales se mostraron públicamente a favor de rectificar su conducta. Si sumamos a otros diez que dieron el quórum, se llega a 50 y faltarán tres votos.