En pleno año electoral y como broche de oro de su gestión, el expresidente de Diputados, Pedro Alliana (ANR, HC), renovó el contrato de cerca 500 funcionarios cuyos vínculos fenecían el 1º de julio.
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En su informe de gestión ante el pleno, Alliana se jactó de su brillante administración al frente de Diputados, incluso de tener menor cantidad de contratados en el rubro de honorarios y jornales. “Son 130 funcionarios menos los que yo recibí de la administración de Miguel Cuevas”, dijo.
Sin embargo, reconoció que renovó el contrato de 500 funcionarios. “La propia Constitución me avala que tiene que ser hasta el 31 de diciembre, pero si hay alguna objeción del nuevo presidente puede rescindir esos contratos y contratar a otra gente”, indicó.
Esta acción por parte de Alliana no agradó al nuevo presidente de Diputados, Carlos María López, quien junto con los demás miembros de la mesa directiva asumió funciones a partir del 1º de julio.
Titular de Diputados dice que Alliana no tenía atribución
“La renovación de la firma es a partir del 1 de julio, que ya corresponde a esta presidencia; creo que la administración anterior no tenía atribución para ello; sin embargo, estamos analizando caso por caso y mi equipo ya está trabajando en eso”, indicó López.
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Nombramientos a más de 60 funcionarios
Alliana también realizó un total de 66 nombramientos, varios de ellos sin concurso, que representarán una erogación mensual de G. 238 millones. Privilegió a funcionarios de aliados y operadores políticos, entre ellos a Iván Fernández, hijo del presidente de la Seccional Colorada Nº 23, Hugo “Chapu” Fernández. No cuenta con título académico.