Rubén Villalba, de 59 años de edad, fue detenido el lunes a las 03:00 en una vivienda del asentamiento 15 de Agosto que funciona dentro de predio de la estancia conocida como Sanabria Cue, en las coordenadas 24° 33′ 48″S, 55° 49′ 38″ W, a cuatro kilómetros de la Ruta PY13 y a seis kilómetros de la Ruta PY03, en el distrito de Yasy Cañy, departamento de Canindeyú.
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La operación policial fue encabezada por el departamento de Investigaciones de Canindeyú y apoyada por la Dirección de Policía de Canindeyú y la Fuerza de Operaciones Policiales Especiales (FOPE) de Asunción.
El fiscal de Curuguaty, Christian Ramón Roig Escandriolo, quien supervisó el procedimiento, presentó imputación contra Rubén Villalba por asociación criminal, amenaza de hecho punible, transgresión a la ley de armas y detentación.
El juez de Curuguaty, Ramón Alberto Florentín, además de admitir la imputación, decretó este martes la prisión preventiva de Rubén Villalba, quien pasará a guardar reclusión en la penitenciaría regional de Coronel Oviedo.
Cabecilla de invasiones y ataques
El agente del Ministerio Público Christian Roig refirió que Rubén Villalba dirige un grupo de supuestos sintierras que mantiene invadida no solo la estancia Sanabria Cue, sino también otros establecimientos vecinos como uno que es conocido como Serrati Cue, donde incluso recientemente intentaron matar a los empleados en una emboscada a balazos.
Según la información de inteligencia recolectada por la Policía, Rubén Villalba, además de instalarse a la fuerza en la propiedad ajena, también exigió la cesión de 500 hectáreas para permitir a los propietarios trabajar tranquilos.
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Los uniformados que investigaron el caso informaron a la Fiscalía que Rubén Villalba y su gente tienen varias armas de fuego.
De hecho, el famoso dirigente sintierra fue sorprendido ayer en posesión de un fusil calibre 7.62, una escopeta calibre 12 y una pistola calibre 9 milímetros, entre otras evidencias.
Fusil de la Policía, en manos de seguidores de Rubén Villalba
Los seguidores de Rubén Villalba tendrían también en su poder un fusil Galil calibre 5.56 perteneciente a la Policía Nacional.
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El arma fue robada en el año 2017 tras el asesinato del suboficial primero Ubaldo Remigio Aguilar Benítez y el suboficial ayudante Francisco Benítez Benítez, del Grupo Especial de Operaciones (GEO) del departamento de Caaguazú, quienes fueron atacados cuando custodiaban una estancia en la colonia Bella Vista del distrito de Yhú.
Un “comunicador”
La comitiva que atrapó a Rubén Villalba también detuvo ayer de madrugada a uno de los seguidores de este, Juan Carlos Herrera Rojas, de 30 años.
Este fue ubicado en su casa de la colonia Mandu’arã de Yasy Cañy.
De paso, los policías y funcionarios de la Fiscalía allanaron la radio comunitaria Mandu’arã FM que dirigía hasta ayer el detenido Herrera, quien fue imputado por asociación criminal y amenaza de hecho punible.
Masacre de Curuguaty
El principal detenido de ayer, Rubén Villalba, había sido capturado en 2012 como principal sospechoso de la Masacre de Curuguaty, que dejó seis policías y 11 campesinos fallecidos.
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En 2016 lo condenaron a un total de 35 años de cárcel, pero en 2018 la Corte Suprema de Justicia anuló ese fallo y Rubén Villalba y los demás sentenciados en aquella ocasión fueron liberados. Así, el caso quedó en el oparei.