El jueves último, el ministro del Interior, Enrique Riera, y el comandante de la Policía, Carlos Benítez, anunciaron en una conferencia de prensa que casi todos los miembros del clan Villalba que estaban en teoría vigilados en Argentina huyeron de ese país.
También contaron que los compatriotas pasaron por Bolivia, donde vivieron una breve temporada, y que ahora están instalados en Venezuela, donde incluso ya consiguieron refugio político.
Al día siguiente, la jueza de Crimen Organizado de Paraguay, Lici Teresita Sánchez, envió a Venezuela un exhorto de extradición solicitando la detención de seis mujeres del clan Villalba que están imputadas en nuestro país por el fiscal Federico Delfino por asociación terrorista.
Supuestamente, las mujeres adoctrinaban a niños y luego los llevaban al campamento de la gavilla Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), para convertirlos en combatientes de la banda.
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Las requeridas en extradición son la matriarca de la familia, Mariana De Jesús Ayala López, de 80 años; su hijas María Rosa Villalba Ayala, de 46 años, y Myrian Viviana Villalba Ayala, de 44 años.
También se pidió la captura de tres nietas de Mariana De Jesús, que son Claudia Anahí Oviedo Villalba, de 29 años (hija de los condenados Alcides Osmar Oviedo Brítez y Carmen María Villalba Ayala); Tania Tamara Villalba Ayala, de 23 años (hija de la extraditable María Rosa Villalba Ayala) y Viviana Monserrat Caballero Villalba, de 22 años (hija de la extraditable Myrian Viviana Villalba Ayala).
Escándalo internacional
Estas seis mujeres, más otros miembros de la familia, como el buscado por secuestro José Mariano Villalba Ayala, de 55 años, habían sido localizados e incluso detenidos el 12 de abril de este año en Buenos Aires, Argentina, por pedido de la Justicia de Paraguay.
Sin embargo, fueron liberados inmediatamente porque había sido gozaban del estatus de refugiados.
Esta condición era ignorada por las autoridades paraguayas y argentinas, lo que configuró un verdadero escándalo internacional, porque se movilizó todo el aparato estatal para nada.
Después de eso, la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, aseguró que le retirarían el refugio a los epepistas y que los entregarían al Paraguay.
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Incluso, Bullrich vino a Paraguay y se reunió el 6 de junio pasado con las víctimas y familiares de víctimas del EPP, a quienes les dijo que no se preocuparan porque los epepistas estaban vigilados y les ratificó que serían traídos a nuestro país para responder por sus crímenes.
La dura realidad
Pese a que en teoría estaban vigilados, los epepistas escaparon de Argentina ya en junio pasado, vivieron en Bolivia los siguientes cinco meses y el 27 de octubre pasado entraron a Venezuela.
Incluso, el 26 de noviembre pasado, Myrian Viviana Villalba Ayala fue detenida por la Policía de Venezuela en la ciudad de Caracas, pero la tuvieron que liberar porque exhibió su carnet de refugiada, lo que le otorga inmunidad judicial.
Pronunciamiento
Beatriz Denis, una de las hijas del secuestrado por el EPP Óscar Denis, se pronunció al respecto señalado que “temíamos que esto ocurriera”.
También recordó que cuando Patricia Bullrich se reunió con ellos en Paraguay “expresé que fue una reunión esperanzadora por el compromiso que ella había hecho, del monitoreo a estas personas, de que serían vigiladas”.
Cuando eso, Beatriz Denis pidió que por favor se tomaran todas las medidas y acciones necesarias “para que no ocurra lo mismo que con Arrom, Martí y Colmán”, en referencia a Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Colmán, quienes son buscados en Paraguay por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi, pero que ahora viven con refugio político en Finlandia.
“Al final, estos criminales se pasean por el mundo con el supuesto estatus de refugiados o perseguidos político, cuando lo que hacen es lucrar con la libertad de personas, de paraguayos de bien. Secuestran, reclutan y hasta asesinan a personas y piden refugio como perseguidos. Estos son enemigos del pueblo paraguayo, porque eso es lo que son, y deben ser extraditados y rendir ante la justicia paraguaya”, expresó Beatriz Denis.
La mujer también resaltó que los epepistas “siempre están no solo a un paso, sino varios pasos delante de todo lo que hace el Gobierno. Cuando se logra saber dónde están y se los captura, resulta que ellos ya están gestionando refugio en ese país o en otro”.
Sobre el pedido de extradición hecho a Venezuela, la hija de Óscar Denis manifestó que “vemos con buenos ojos el pedido de extradición que realizó la justicia paraguaya a la justicia venezolana; esperamos que tenga eco favorable y que de una vez por todas estos criminales rindan cuentas por los crímenes y acciones cometidas”.
“No vamos a cansarnos de pedir justicia, de exigir resultados al gobierno, que hasta la fecha no tenemos; no nos cansaremos de buscar a papá. Ya llevamos más de cuatro años sin saber de él, años sin saber de Edelio y de don Félix, seguiremos hasta encontrar a los tres”, avisó.
“Nos deben tanto. Nos deben justicia, nos deben paz, nos deben libertad. Es hora de resultados”, concluyó.