El caso se ejecutó el 9 de julio pasado, cuando policías de Crimen Organizado recuperaron en una habitación del hotel Armele de Asunción unos 200 celulares robados, la mayoría de ellos iPhone.
El agente del Ministerio Público también confirmó que está vigente la orden de detención contra el colombiano Álvaro Blanco Patiño, de 43 años, quien sería el jefe de la organización, ya que este fue quien alquiló la habitación de hotel donde estaban escondidos los dispositivos y donde fue arrestado su compatriota Nicolás Alejandro Tafur Aponte, de 23 años, quien está preso en Tacumbú.
Tras aclarar confusión, desvinculación
Eugenio Ocampos, igualmente, aclaró que dejó sin efecto la orden de captura del paraguayo Emilio José Aguilar Alcaraz, de 34 años, quien en principio había sido investigado como uno de los que desbloqueaban los celulares robados por los colombianos.
Aguilar aparentemente fue confundido con otra persona en el análisis del circuito cerrado del hotel Armele y también porque llegó a ser detenido en 2023 por un hecho similar, en la operación Alfil de Antisecuestro, en la cual obtuvo el sobreseimiento definitivo luego de haber reparado el daño patrimonial, según la nota firmada por su abogada Viviana Guanes.
En un escrito enviado a ABC, Aguilar señala que la publicación “fue a raíz de una confusión con la imagen proporcionada por los agentes de Policía identificando con mi identidad, siendo que dicha imagen correspondería a otro ciudadano, quien dice ser coautor del hecho punible de hurto agravado denunciado, conforme al circuito cerrado del hotel Armele, nunca he pisado ese hotel y menos visitarle a este señor”.
Carta a la directora de ABC
Sobre su situación procesal, Emilio José Aguilar Alcaraz envió una carta a la directora de ABC Color, Natalia Zuccollillo. El texto señala lo siguiente.
Emilio José Aguilar Alcaraz, con cédula 4.577164, me dirijo a usted en ejercicio del derecho a réplica a fin de contestar y refutar la publicación del día 10 y 15 de este mes, conforme al artículo 28 de la Constitución Nacional, en a página de Policiales del diario que dirige, que estuvo acompañado del título: “BÚSQUEDA A DOS HACKERS PARAGUAYOS”, en el operativo Black Phone, realizada en el microcentro por agentes del Departamento Contra el Crimen Organizado, posteriormente se vuelve a publicar en fecha 15 de julio de 2024 cuyo título menciona “BUSCAN A OTRO COLOMBIANO TRAS LA RECUPERACIÓN DE CELULARES”, específicamente con el subtítulo: “LOS HACKERS”, en que se afirmó que mi persona es la persona a quien están sindicando como coautor y visitante del denunciado considerándome como hacker que desbloquea celulares, y que cuento con antecedentes por hechos idénticos.
Las publicaciones mencionadas contienen inexactitudes, falsedades y afirmaciones erróneas, violando el derecho de las personas a recibir información veraz, responsable y ecuánime, consagrados en el citado artículo mencionado.
La mencionada publicación fue a raíz de una confusión con la imagen proporcionada por los agentes de la Policía identificando con mi identidad, siendo que dicha imagen correspondería a otro ciudadano quien dice ser coautor del hecho punible de hurto agravado denunciado, conforme al circuito cerrado del hotel Armele, nunca he pisado ese hotel y menos visitarle a ese señor.
Me corresponde señalar la verdad de los hechos para refutar interpretaciones torcidas que seguidamente paso a exponer.
1- Conforme a la publicación de la fecha 10 de julio de 2024, en un procedimiento efectuado en el microcentro capitalino donde se realizó un allanamiento habiéndose recuperado 176 celulares, que culminó con la captura de un ciudadano colombiano, que acopiaba los teléfonos para llevarlos a su país. Según el comisario Pedro Lesme comentó que el colombiano formaría parte de una banda integrada por extranjeros ya identificados. Según los datos aportados por el hotel, el colombiano ahora capturado y sus compatriotas, que siguen prófugos, recibían casi todos los días la visita de dos paraguayos, Elías Abel Ortiz, de 23 años, y Emilio José Aguilar Alcaraz, de 34 años (cosa que no se ajusta a la verdad), quienes ya habían sido detenidos por hechos similares en el 2022, en este caso tampoco se ajusta a la verdad, no tengo absolutamente nada que ver en el hecho ocurrido en el año 2022, soy propietario de un local comercial que se dedica a la reparación de teléfonos de la marca iPhone y equipos informáticos de la misma marca, que es totalmente contrario al desbloqueo como afirman.
2- A raíz de casos anteriores, específicamente en el año 2023, me vincularon por un hecho de reducción, ya que se me había entregado un teléfono hurtado para reparación, causa en la cual ya he sido sobreseído definitivamente, conforme a las investigaciones realizadas por el Ministerio Público.
3- Todas las publicaciones son falaces respecto a las afirmaciones dirigidas a mi persona, que me han perjudicado no solo judicialmente, sino también económicamente y comercialmente, ya que procedieron a cancelarme mis cuentas bancarias y marginarme del sistema financiero.
4- A motus propio, a través de redes sociales, realicé una investigación con respecto al señor quien ha sido denunciado, notando que fui confundido. Por las características similares que tenemos.
5- Estuve consternado, con orden de captura, me enteré del hecho por los amigos que me envían las publicaciones, atenta contra mi honorabilidad y mi imagen fue expuesta por todos los medios periodísticos, televisivos y radiales, ocasionándome un daño irreparable a mi imagen y mi empresa.
6- Todo esto por no tener una información certera de la identidad de la persona sindicada. Grande fue la sorpresa cuando veo mi foto por la prensa siendo ya sindicado como parte de la gavilla y el hacker buscado con orden de detención.
7- Conforme a la publicación del 15 de julio de 2024, en esa ocasión me puse a disposición cuando me enteré del allanamiento en mi local en el año 2023, en el acto la víctima reconoció su celular que fue llevado al local para reparación, siendo entregado en el momento, según las investigaciones realizadas por el Ministerio Público de todos los celulares incautados en mi local, ninguno de ellos fue denunciado como robado ni menos hurtado, por lo que se procedió al retiro íntegramente del lote de celulares incautado esa vez, y cabe mencionar que el sobreseimiento definitivo se dio por no haber participado en el hecho punible de hurto. Cabe destacar que una parte del documento dice que el señor Elías era el técnico del negocio, desmiento totalmente, nunca permaneció ni fue funcionario del mismo.
Resulta evidente que tenían conocimiento de cómo se dieron los hechos, sin embargo la información fue distorsionada con lo cual el diario ABC, realizó publicaciones que no cumplen con los criterios constitucionales, según el cotejo y veracidad de los hechos.
Se sugiere se adopten las medidas que aseguren os mismos criterios de control según la veracidad de lo que se publica, de tal forma a evitar dañar la reputación de las personas y mentir a los lectores.
Solicito que este derecho a réplica, sea rectificada en el mismo espacio y en las mismas condiciones en que se publicaron las informaciones falsas y ofensivas contra mi persona.