Un joven identificado como David Rotela fue víctima de la inseguridad hace poco más de un año cuando le robaron un vehículo de su propiedad. Realizó la denuncia, pero nunca tuvo respuestas; sin embargo, no perdió la esperanza y se embarcó en la búsqueda a través de las redes sociales.
En la página de Facebook de una playa de venta de autos encontró la fotografía de uno “muy parecido al suyo”, así que solicitó la ayuda de algunos amigos para que se hagan pasar por interesados y pidieran más fotos.
Con esos recursos fue reconociendo aspectos particulares del vehículo “que sólo el dueño conoce”, relató a la 1330 AM.
Finalmente, pudo dar con la dirección de la playa y puso en funcionamiento la última parte de un plan que fue armando de manera improvisada a medida que juntaba las pruebas.
Llegó hasta el lugar y para su sorpresa el vehículo se encontraba en exhibición en la vereda y las puertas estaban abiertas.
Con la copia de la llave que tenía en su poder se acercó y probó el arranque. De inmediato salió del lugar a bordo de su auto.
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En ese momento comenzó una persecución por parte de varias personas en una camioneta y otra que conducía un cuaciclón.
Intentó llegar hasta la Fiscalía que lleva su caso, pero se percató de que el combustible era poco, así que se dirigió hasta la comisaría más cercana, en este caso, la séptima del área metropolitana.
Denunció el hecho y el vehículo fue trasladado hasta la comisaría 15ª Metropolitana, con la promesa de que verificarían el caso y se pondrían en comunicación con él, lo que no sucedió hasta ahora.
La víctima aguarda que tanto la Policía Nacional como la Fiscalía revisen su caso y con eso lograr la recuperación del vehículo de su propiedad.