La supuesta guarida de Marcelito que fue allanada queda en el barrio Santa Rosalina de San Bernardino, a una cuadra de la ruta Doctor Federico Chávez, que a su vez conduce al municipio de Altos.
El operativo fue ejecutado por agentes de la Dirección de Policía de Cordillera, cuyo director es el comisario principal Blas Vera, y elementos del departamento de Investigaciones de la misma región, cuyo jefe es el comisario Jorge Vidallet.
La vivienda está alquilada supuestamente desde hace año a nombre de la que ahora sería la novia de Marcelito, María Cecilia Maldonado Ocampos, de 22 años.
La pareja estuvo en la casa hasta el miércoles último, cuando fue perseguida por la Policía al salir del lugar en un automóvil Kia Rio que abandonaron en Limpio ya que tenía orden de secuestro por falta de pago.
Desde ese día, la vivienda permaneció en vigilancia hasta que hoy el fiscal Gustavo Sosa consiguió la orden de allanamiento.
Equipos para clonar llaves
Una vez adentro, los intervinientes encontraron, por ejemplo, una camioneta Toyota Hilux robada en Brasil pero que tenía una chapa robada en Paraguay y que corresponde a una camioneta similar, así como una camioneta Kia Sportage robada en San Bernardino y que también tenía la chapa de otro vehículo de idénticas características.
Igualmente, fueron halladas dos lanchas, dos cuaciclones, una jet sky y una motocicleta que también serían sustraídos, de acuerdo con los datos.
Pero lo más impresionante que hallaron fueron los equipos tecnológicos que tenía Marcelito en la casa para clonar las llaves de vehículos de alta gama que aparentemente acostumbraba a robar, así como aparatos inhibidores de señal que le permitían atracar rodados estacionados.
Cayó en 2019
Denis Marcelo Roa Fukuhara, alias Marcelito, fue arrestado por última vez el 28 de marzo de 2019 tras una persecución y balacera en Luque.
Sin embargo, escapó de la Fiscalía de Luque al día siguiente tras una supuesta distracción de los policías que lo custodiaban.
Marcelito acumula decenas de detenciones en los últimos 15 años.
Inició como tortolero, pero también ya fue detenido en posesión de drogas, cheques robados y hasta documentos falsos.
Una particularidad de Marcelito es que siempre actuaba con protección de policías corruptos, ya que cada vez que caía preso tenía consigo una radio con frecuencia policial que le prestaban sus cómplices uniformados.