En prosecución al operativo A Ultranza, los fiscales de la Unidad Especializada en Lucha contra el Narcotráfico, Deny Yoon Pak, Isaac Ferreira y Fabiola Molas formularon la imputación N° 12 contra el uruguayo Sebastián Marset o por su identidad boliviana Gabriel de Souza Baumer, y los paraguayos Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, y Gilberto Sandoval, por los hechos de importación y exportación de sustancias, asociación criminal y lavado de dinero.
En ese contexto, la jueza penal de garantías especializada en Crimen Organizado Rosarito Montanía, a través de su Auto Interlocutorio (resolución(N° 293), dictó la captura y declaró la rebeldía de los tres, así como la interrupción del plazo hasta que subsista el estado en el que fueron declarados los investigados en A Ultranza.
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En tanto que por medio del AI N° 295, la magistrada ordenó la captura internacional con fines de extradición de Marset, Insfrán y Sandoval, al mismo tiempo libró oficios a la Comandancia de la Policía Nacional, la Dirección de Migraciones e Interpol-Asunción. Además autorizó la publicación de esa orden en la sección “Wanted Persons” de la web de la Interpol.
El marco penal para los hechos punibles señalados en la nueva imputación están establecidos en 5 a 10 años de prisión para la importación y exportación, en tanto que de 5 a 15 años de cárcel para el lavado de dinero y 5 a 15 años de pena privativa de libertad para la asociación criminal, todo según la Ley N° 1340 y sus modificatorias. Así, por concurso, la pena máxima aplicable en caso de que sean condenados sería de 22 años y 6 meses de encierro. Se tiene que tener en cuenta que el plazo de prescripción es de 15 años, según el AI N° 295.
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A Ultranza investiga una megarred de narcos liderada por Sebastián Marset
Según datos de fiscalía que dieron pie al operativo A Ultranza Py, ejecutado el 22 de febrero de 2022, entre el 2020 y 2021 varias organizaciones criminales se juntaron en territorio paraguayo y concretaron el envío de cargas de cocaína a otros continentes, así como el lavado de activos obtenidos con dicha actividad, para lo que constituyeron empresas, para disimular las ganancias con la adquisición de bienes muebles e inmuebles, registrados a nombre de terceros.
El grupo era liderado, conforme a la imputación, por una parte por Sebastián Marset, quien era el encargado de coordinar la introducción vía aérea de sustancias desde Bolivia a Paraguay, específicamente dentro de la Reserva Natural Cabrera-Timané, de 125.061 hectáreas, ubicada dentro del departamento de Alto Paraguay, donde funcionaba una pista clandestina.
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Miguel Ángel Insfrán, tras coordinar con Marset, presuntamente ponía en marcha la logística para el trasbordo de la droga a una aeronave con matrícula paraguaya y trasladarla hasta un establecimiento de Presidente Hayes, que sería del imputado Hugo Manuel González Ramos, donde la avioneta quedaba resguardada, hasta que Insfrán la movía a sus propiedades del departamento Central, para su acopio y su posterior envío a África y Europa, vía marítima.
Para lograr la exportación de la sustancia, la asociación Marset-Insfrán contó con colaboración de personas físicas que pusieron a disposición sus empresas. Entre ellas “Neumáticos Guairá SA”, propiedad de Luis Fernando Sebriano González, refiere la imputación..
Empresas al servicio del narcotráfico
A través de la “Artis SA”, propiedad de Luis Fernando Sebriano González, se enviaron 1.131 kilos de cocaína en bolsas de Big Bag, que contenían harina de soja, dentro de un contenedor, que fue despachado el 7 de abril de 2020. La carga fuedescubierta el 18 de junio de 2020, en el puerto de Amberes.
Y posteriormente a través de “Maxigrains S.R.L.”, en la que Sebriano era vicepresidente, se enviaron 1.071 kilos de cocaína, ocultas dentro de bolsas de Big Bag que contenían harina de soja, dentro de un contenedor, que partió del Puerto Seguro Fluvial de Villeta y fue descubierta el 23 de abril de 2020 en el Puerto de Amberes.
A través de “Neumáticos Guairá SA” se enviaron 10.964 kilos de cocaína, ocultas entre una carga de cuero detectada dentro de un contenedor despachado el 12 de febrero de 2021 desde el Puerto Seguro de Villeta y descubierta el 2 de abril de 2021en el Puerto de Amberes.
Con la firma “Guaraní Business Import & Export S.A.”, se enviaron 4.174 kilos de cocaína, con el logotipo “Corso”, que estaban ocultos en bolsas Big Bag, nuevamente con harina de soja, que salieron del Puerto Seguro Fluvial de Villeta, el 27 de agosto de 2021 y descubierta el 30 de octubre en Países Bajos.
Movilidad aérea de la cocaína
El último cargamento de droga exportado habría sido parte del alijo que supuestamente transportó Gilberto Esteban Sandoval Giménez desde Lagerenza hasta Villa Hayes, en un avión Cessna 210 con matrícula ZP-BOP, propiedad de la firma “Barakah SRL”, que pertenece a Miguel Ángel Insfrán y cuyo gerente era Jorge Antonio Giménez Bogado, quien antes del operativo simuló la venta del avión.
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Según la imputación N° 02 del Ministerio Público, Gilberto Sandoval desde noviembre de 2019, inició la compra de aviones, en especial Cessna, modelos 206 y 210, debido a su utilidad, pues cumplían con las especificaciones, preferidas por las organizaciones criminales
A partir de abril de 2020, en su carácter de piloto aviador civil, habría formado parte de la organización liderada por Marset e Insfrán. Llegó a contar con 13 aviones, que registró a nombre de terceras personas y empresas para no levantar sospechas. Para disimular su actividad ilegal hacía servicios de taxi aéreo, especialmente a Marset, hasta su estancia en Paraguarí, al aeropuerto de Ciudad del Este, Filadelfia y Loma Plata.