La jueza penal de garantías especializada en Crimen Organizado, Lici Sánchez, autorizó a través de su AI N° 339 la realización del aspirado de una avioneta Cessna Centurión 210, con matrícula CP-2769, blanca con azul, incautado con 400 kilos de cocaína el mes pasado, en Misiones.
La diligencia, solicitada por el agente fiscal Ysaac Ferreira, de la Unidad Especializada en Lucha contra el Narcotráfico, se realizará en carácter de anticipo jurisdiccional de prueba.
Esta resolución se da en el marco de la causa caratulada como “José Abel Robalino Jacome, Miguel Ángel Garrido, Héctor Lorenzo González, Vicente Sanabria y Adolfo Osmar Sanabria s/ tráfico internacional, tenencia sin autorización y asociación criminal”.
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En este contexto, la magistrada fijó para el 14 de octubre próximo, a las 8:30, la realización del aspirado y levantamiento de partículas y polvos del avión, que se encuentra resguardada en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi. Para ello, la jueza designó como posibles peritos a los licenciados Cristhian Benítez, Gerardo Ortiz, Ana Núñez, del Laboratorio Forense del Ministerio Público, de los cuales solo uno deberá jurar y llevar a cabo la diligencia.
Tras diligencia, avioneta quedará a cargo de la Policía
Con este procedimiento se pretende certificar si en el avión hay restos de cocaína u otras sustancias estupefacientes, así como de otra clase de indicios, como la existencia de mangueras instaladas para abastecer de combustible en vuelos desde depósitos de carburante transportadas en la cabina de vuelo, generalmente bidones, con lo cual se consigue una mayor autonomía de vuelo de las aeronaves.
Por último, la jueza dispuso que después de que se haya concluido con el procedimiento la avioneta quede bajo guarda y segura custodia de la Agrupación Aérea de la Policía Nacional, que está a cargo del comisario José Osvaldo Aguiar.
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El avión Cessna Centurión 210 con matrícula CP-2769, fue interceptado e incautado el pasado 5 de setiembre, cerca de las 11:00, tras haber descendido a una pista clandestina situada dentro del predio de la estancia “Takuarembo”, ubicada a 1,5 kilómetros del casco urbano de la compañía Arazape y a 13 kilómetros de la ciudad de San Miguel, en el departamento de Misiones.
Paraguayos y bolivianos, procesados
La nave tenía en su interior un total de 406,920 kilos de cocaína que fueron incautados por la comitiva encabezada por le fiscal Ysaac Ferreira y agentes del SIU-Antinarcóticos de la Policía Nacional.
En dicha ocasión fueron detenidos los paraguayos Héctor Lorenzo González (32), Vicente Alcides Sanabria Figueredo (49) y Adolfo Osmar Sanabria Figueredo (37) y los bolivianos, Miguel Ángel Garrido Salavarrieta (30) y José Abel Robalino Jacome (29), todos imputados ya por posesión, y de tráfico de drogas peligrosas, así como asociación criminal.
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La teoría formulada por el agente fiscal en su imputación es que Miguel Garrido Salvatierra cumpliría la función de copiloto de la aeronave que transportaba la carga ilícita, además de cumplir posibles funciones de relevo en el mando de la misma y actuar como hombre de reacción en caso de desperfectos mecánicos.
En cuanto a Héctor González, se presume que el mismo sería coordinador y encargado de la logística del trabajo, además de recibir la avioneta que transportaba la sustancia, y de su reabastecimiento de combustible. También, se desempeñaría como encargado de realizar el pago por el uso de la pista.
Vicente Sanabria, dentro del grupo estaría como responsable de la recepción de la droga, el reabastecimiento de la aeronave, y también sería quien realiza el trabajo pesado, de preparar los bidones y la vigilancia y cobertura de la zona para el resguardo del lugar junto, con su hermano Adolfo que también cumpliría las mismas funciones.
Una segunda aeronave que debía descender en la misma pista, realizó más tarde un aterrizaje forzoso en un camino vecina de Bella Vista, en la localidad de Yhú, departamento de Caaguazú. Ahí se incendió por completo y sus tripulantes se dieron a la fuga.