La víctima fue identificada como Pedro Evaristo Martínez Martínez (38), quien era una persona muy conocida en la ciudad, debido a que en su juventud era un jugador de fútbol y actualmente participaba en los torneos de piki vóley, al mismo tiempo era constructor de obras y manejaba un lavadero de autos, según los investigadores.
De acuerdo con el relato de los testigos, poco después de las 09:00 Pedro Evaristo llegó hasta el comedor “Enriquito” ubicado detrás de la cancha del club General Artigas, en el barrio Centro para desayunar.
A esa hora había unas 20 personas sentadas en el comedor, por lo que Pedro Evaristo pasó hacia la cocina para hacer su pedido de comida. En ese momento llegaron los dos sicarios a bordo de una motocicleta y pistolas en manos ordenaron a todos los comensales que se tirasen al suelo boca abajo, luego pasaron hacia la cocina, donde encontraron a la víctima, a quien sacaron al corredor.
Allí uno de los pistoleros le ordenó que se tire al suelo, también boca abajo, le quitó su celular y al tiempo que le gritaba “anive ecreá problema” le disparó dos tiros casi a quemarropa en la cabeza, lo que le produjo la muerte en cuestión de segundos.
Una vez que la víctima expiró, los dos matones escaparon del lugar sobre el mismo biciclo que dejaron estacionado en frente del comedor con el motor en macha, según explicaron.
Las hipótesis
Fuentes del departamento Investigaciones de Canindeyú señalaron que existen versiones de que Pedro Evaristo estaba vinculado a una estructura mafiosa que presuntamente lideraba Ulises Enciso Ruiz Díaz (31), quien fue asesinado a tiros junto con Paulino Báez Segovia (37) el pasado 17 de mayo último, en la zona de Yby Pytã.
Es más, la muerte de estas personas sería en el marco de una guerra entre facciones antagónicas que buscan controlar la producción y tráfico de la marihuana en aquella zona del país, señalaron fuentes de la Policía.
Agentes de Investigaciones de Curuguaty, quienes llegaron al lugar del atentado levantaron algunas evidencias y testimonios, luego procedieron a la búsqueda de imágenes de circuitos cerrados instalados en las inmediaciones para intentar identificar a los presuntos atacantes, según explicaron las fuentes.