En un día de clases, un alumno consulta a su profe si desearía volver al colegio cuando se jubile y el docente responde: “Preguntale a un preso si extrañará la cárcel después de salir”. Esta frase describe el sentir de la mayoría de los estudiantes, pero en verdad, los alumnos viven deseando escapar de un lugar al cual luego querrán volver.
Leer anécdotas al mirar el grupo de Whatsapp con tus excompañeros o ver en Instagram historias de alumnos en su primer día de clases son cosas que se vuelven costumbre con el correr del tiempo en la vida de los “exas”.
Cuando se aproxima el aniversario de tu último primer día de clases, leer la notificación de “tienes recuerdos para rememorar” en tu Facebook es todo un desafío. El anhelo de volver aumenta significativamente y, con el correr del tiempo, te das cuenta de que la frase “tercero no se va” fue nada más que un simple deseo del momento.
Es entonces cuando comienza a salir a flote la añoranza. Automáticamente uno se transporta a su vieja aula, donde compartía con los compañeros de su época estudiantil, y empieza a recordar todas las risas, peleas, exámenes y cada momento vivido en esa sala de clases, en la que ahora otros alumnos crearán sus propios recuerdos.
Las peleas por la colación entre quienes querían viaje o fiesta y el dilema de dónde conseguir los trajes y vestidos son conflictos típicos que suceden en el último año. Estas discusiones en su momento eran estresantes, pero hoy solamente representan anécdotas que quedarán para siempre.
También todos tuvimos profesores que nos marcaron positivamente en la época de colegio, desde el docente que era estricto e implantaba disciplina rígida en el aula, hasta esa maestra que con el correr del tiempo se volvió tu segunda mamá. No olvidamos a los educadores que parecían argeles, pero transcurriendo el año se ganaron el cariño del curso.
Las actividades del colegio y del centro de estudiantes como el San Juan, las olimpiadas, los safaris y festivales son momentos que siempre quedarán en la memoria del estudiante. Al terminar el colegio, el exa se dará cuenta de que en su época de alumno creaba recuerdos sin saberlo porque simplemente se estaba divirtiendo.
Por Lucas Ovelar (17 años)