En el mundo virtual del Whatsapp, Facebook, Instagram, Twitter o Snapchat existe una jungla habitada por cientos de jóvenes expuestos a toda clase de peligros que atentan contra su privacidad, integridad y salud mental. Lo que comienza con algo supuestamente inofensivo, en casos que involucran al uso del Internet, es posible que termine con una persona arrepentida por un error.
La conocida frase “send nude” o “sexteo” hace referencia al envío de fotos íntimas a través de alguna plataforma virtual en redes sociales; esta práctica riesgosa se expande como una plaga entre parejas, amigos o, incluso, desconocidos. Todos somos conscientes del poder de viralización en un abrir y cerrar de ojos que tienen las redes, pero, al parecer, la concientización aún no es suficiente para frenar del todo el sexting y la sextorsión.
Desde la falta de conocimiento sobre la famosa “bases y condiciones” de las redes, hasta una anticuada “prueba de amor", existen varios motivos que inducen a autofotografiarse para luego enviar la imagen al receptor. Aunque resulte increíble asimilar, en la actualidad, una fotografía instantánea puede ser la responsable de problemas mentales como la depresión o el pensamiento suicida, indica una campaña en Twitter con el hashtag “stop sexting".
En un intento de concientización sobre la sextorsión, este año, el Ministerio del Interior publicó un posteo que decía “ninguna señorita atractiva te va a escribir; no caigas en la trampa”. Además del nivel de machismo que reflejaba la campaña, los internautas desataron un hilo de burlas ya que, supuestamente, una mujer atractiva solo podría escribir a otra persona para extorsionar.
Por otra parte, la palabra “pack” es una jerga juvenil que hace referencia al sexting, pues si alguna persona se refiere con este monosílabo, está insinuándote que le envíes alguna foto íntima; entonces, correr el riego depende de cada uno. Del mismo modo, hace unos meses, un instagramer paraguayo fue víctima de burlas ya que, en grupos de Whatsapp recorría su foto privada.
Tu foto recorre por Whatsapp, tu colegio tiene en su poder esa foto íntima que te sacaste y, al rato, la imagen llega a la vista de tus amigos y parientes. Entonces, ¿mandarías un “pack”?
Por Ezequiel Alegre (19 años)