El “bicicleteo”, los préstamos, compras a cuotas o tarjetas de crédito suelen ser las salidas para llegar a fin de mes, cuando arden los ojos del equino. Asimismo, en los “felices” días después de cobrar, generalmente tendemos a darnos “pequeños” gustos o comprar lo que esté en oferta sin tener en cuenta si realmente lo necesitamos.
Esta forma de vivir al límite, en el ámbito económico, resulta una preocupación constante que puede impedir nuestra tranquilidad. A causa del estrés, podríamos desarrollar dolencias a nivel físico, como el famoso akãrasy.
Por otra parte, para no caer en la mala administración de las finanzas personales y tener una economía más saludable, es imprescindible manejar concientemente nuestro dinero. La entidad “Estrategia Nacional de Inclusión Financiera” (ENIF) realiza campañas y brinda información para que los ciudadanos mejoremos nuestros hábitos en materia económica.
En la última campaña de la ENIF, denominada “Más vale saber”, se recomienda buscar salud financiera mediante la conciencia de nuestra situación económica. Con esa finalidad, debemos mantener el control de nuestros ingresos y lo que gastamos para establecer un presupuesto que nos permita saber cuánto dinero nos sobra o falta cada mes.
Según informaciones de “Más vale saber”, debemos anotar todo lo que compramos, por más mínimo que sea el monto. Esta estrategia nos ayudará a reconocer cuales son los gastos que pueden eliminarse, para que nuestro bolsillo llegue con algo de contenido a fin de mes.
En caso de que tengas una deuda y no sepas cómo pagarla, los bancos recomiendan diversas estrategias para lograr el objetivo. Algunos de los métodos pueden ser la “bola de nieve” que consiste en eliminar primero el monto a abonar que nos demande un cargo mensual más pequeño y el “tsunami” que ordena las deudas según la tensión psicológica que nos produzcan, de mayor a menor costo.
Asimismo, otras estrategias sugeridas por el banco podrían ser eliminar primero las cuentas que tienen una mayor tasa de utilidad y abonar en principio las deudas que nos hagan pagar más intereses a lo largo del tiempo.
Un banco local, en su campaña de educación financiera, explica que en cualquier caso, de acuerdo a la configuración de nuestras deudas y preferencias de pago, podemos determinar una u otra estrategia como el vehículo más adecuado para concretar la cancelación de la deuda o, en todo caso, de la inmensa mayoría del monto a pagar.
Los buenos hábitos económicos nos ayudan a gastar lo estrictamente necesario, ahorrar y alcanzar las metas financieras con mayor rapidez. Por eso, es importante que cuidemos nuestra salud financiera. ¡Eñatendéke, ani reperde nde pirapire!
Anahí Acevedo (19 años)