La reciente desaparición de Juan Vera, de 26 años, en causas totalmente insólitas, recuerda a otras personas que también fueron “tragadas” por el Chaco, como el austriaco Wilhelm Wabnegg, quien desapareció en abril del 2019 cuando se disponía a explorar el Cerro León, a bordo de su camión absolutamente equipado hasta para las mínimas emergencias. Del hombre no se encontró el menor rastro.
Otro caso que duerme en el seno de una madre angustiada es el de Leonardo Lares Perdomo, de 24 años, quien salió de su Venezuela natal con destino a Paraguay viajando como mochilero. Su rastro también se perdió en la zona de Infante Rivarola en febrero del 2022 y su madre duda de que alguna vez lo buscaron.
Otro caso, no menos llamativo, es el de una persona hallada en su moto, al costado del camino a mediados de este año en avanzado estado de descomposición, lo que indicaba semanas si no meses de estar allí. Por sus documentos pudieron saber que se trataba de un contratista que trabajaba por la zona de Infante Rivarola, pero no fue nunca buscado, ni por familiares, amigos o afines, y tal vez si alguien no lo encontraba por casualidad, nunca se habría sabido de él.
El caso con más tiempo de todos y con muchos cabos sueltos es el del joven Marcelo Esteban Felhauer Eberhartdt, quien partió de Filadelfia en el 2013 en una camioneta llevando como pasajera a una mujer. La mujer, quien fue sobreseída en la investigación, volvió a su punto de partida, pero el joven desapareció. La Policía encontró dos celulares enterrados en el patio de la vivienda de la misma, pero el caso no tuvo ningún avance, según la madre del muchacho Oti Eberhartdt, que lo busca en Asunción y alrededores guiándose por la información que cada tanto surge hasta la fecha, diez años después.
Pocos ejemplos, muchos casos de lo que el indómito Chaco puede representar para quienes se pierden o son desaparecidos tal vez fuera de su voluntad o envueltos en un evento infortunado. Al paisaje se suman fuerzas policiales con pocos recursos para encarar operativos intensivos de búsqueda y un conformismo que dicta que si algo te pasa en el Chaco, posiblemente no te vuelvan a encontrar.