Tobilleras y falta de voluntad

En el año 2017 se promulgó en Paraguay la Ley 5863 conocida como “del uso de tobillera electrónica”, para mantener a raya a hombres violentos. Una victoria pírrica para las mujeres; pues desde entonces alrededor de un centenar de feminicidas han atacado con saña e impunidad provocando lo de siempre: machirulos que dicen que el feminicidio “no existe”, marchas y reclamos por justicia y, lo peor, autoridades prometiendo que le darán solución “lo antes posible” o cuando logren cuadrar los números para que la seguridad de las mujeres sea su negocio rentable.

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En lo que va del año se han producido 26 feminicidios según datos oficiales. Además del fenómeno de la violencia muestra también cómo funcionan las cosas a favor de los infractores con la complicidad de las autoridades y agentes quienes deberían estar comprometidos con el bienestar de las victimas y no de los agresores. La justicia siempre es benevolente con ellos, con los acosadores, con los agresores y los feminicidas… les dan “una segunda oportunidad” para que puedan terminar “el trabajo” en forma y enviar a las mujeres al más allá.

Las órdenes de alejamiento no se cumplen y las llamadas de emergencia por casos de violencia no se atienden en tiempo y sobre todo en forma. No solo es la justicia, es también la sociedad que estigmatiza a la víctima y la hace responsable de las desgracias que le suceden: “Qué hacía ahí a esa hora…”, “Para qué se viste así”, “Ella lo puso celoso” y en el caso de violaciones o acoso sexual “no hay pruebas conducentes del delito” … y numerosos argumentos que vuelcan la situación a favor de los agresores.

Este tipo de hechos fue considerado como una emergencia en Uruguay que en el año 2019 (dos años después de la promulgación en nuestro país) llevó a la adquisición masiva de tobilleras que ha brindado resultados positivos en términos de prevención de la violencia y colateralmente ha contribuido a descongestionar las cárceles.

El tema en nuestro país es que las tobilleras no tienen esencialmente el carácter de prevención de hechos violentos solamente. La principal motivación para que todos estén corriendo de un lado a otro para “solucionar el tema” no pasa por la seguridad de las mujeres y sus familias. Pasa por a quién le resulte un negocio rentable. Aun así, eso sería mejor que nada. #NiUnaMenos.

mescurra@abc.com.py

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