Con el afán de conseguir votos, hacen “escuchar” eso que la población desea. Es decir, se conocen las necesidades que se tienen como sociedad y prometen satisfacerlas. Como otras tantas veces no faltarán personas que se dejen guiar por el color a la hora de votar sin antes reflexionar sobre los candidatos y sus plataformas de gobierno.
Son numerosas las carencias que se tienen a nivel país, pero una de las más sobresalientes es sin lugar a dudas la honestidad a la hora de manejar el dinero público. Esta también se puede escuchar entre las promesas de los políticos que pugnan por algún cargo en las elecciones del próximo domingo. Algunos de ellos tienen comprobadas acciones que demuestran que solo se trata de engañar nuevamente al electorado.
Ojalá que se pueda ver más allá de las promesas que hacen los políticos de turno a la hora de elegir. Es que de las promesas, la población en general está cansada, pero muchos aún no asimilan esto y continúan votando a las mismas personas o las mismas estructuras instaladas en los partidos políticos.
Nuevamente, en una semana, tendremos una oportunidad de poder designar, voto mediante, a quienes estarán en el poder por cinco años. Y estar allí significa que deben responder a las necesidades que tiene la gente, por sobre todo cumplir lo que han dicho hasta ahora en sus campañas electorales.
Además se tendrá la opción de poder castigar a quienes no han cumplido con lo que han ofrecido en elecciones anteriores.
Los habitantes del primer departamento esperan de las próximas autoridades puedan ser mejores de las que están actualmente. Principalmente aguardan que se realicen mejoras viales, que los hospitales cuenten en forma permanente con medicamentos y especialistas; que mejore la educación y su infraestructura y que haya fuentes de trabajo.