G20, India y Paraguay

El pasado jueves 1 de diciembre India asumió la presidencia del G20 y con ella su líder Narendra Modi ha prometido un liderazgo global con el lema “una tierra, una familia, un futuro”. Con una embajada india recientemente abierta en Asunción, la pregunta que cabe es ¿cómo encaja Paraguay en esta ecuación global?

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A primera vista, por la fama mundial y por el resultado positivo en su desarrollo, la transferencia de conocimientos mediante la tecnología sería el camino. Una ruta muy poco usual para un país como Paraguay cuyas autoridades están acostumbradas mayormente a sacar provecho de colosales préstamos internacionales para su desarrollo económico personal y no para el bien común. No verían dónde está el negocio para ellos.

Pero si dejamos eso de lado, la propuesta se ve auspiciosa pues India, la quinta potencia económica mundial, tiene un bagaje imbatible en términos de creación y desarrollo tecnológico. Así sus softwares de toda índole y su indiscutido liderazgo en la industria del startup le han conferido autoridad en el ámbito.

En ese sentido, el embajador de la India en Paraguay Yogeshwar Sangwan, ha hecho hincapié en este hecho durante una actividad denominada “Karnataka Day”, en la que se han mostrado las bondades del estado más tecnológico de la India, cuya capital Bangalore es considerada la Silicon Valley de Asia.

Desde hace dos décadas se viene diciendo que este siglo es el de la tecnología y Paraguay no debería dudar un segundo en subirse a esta ola. De hecho, la línea del discurso de Modi replicada por su representante en nuestro país es la apertura de la tecnología de manera gratuita aplicada al campo de la educación.

Desde la India existen más de 10 millones de iniciativas tecnológicas que están al alcance de un clic y del cual Paraguay pudiera sacar provecho de manera totalmente gratuita. Una de las barreras podría ser el idioma, pero con voluntad y un poco de esfuerzo esas cuestiones se pudieran ajusta.

El conocimiento tecnológico que ofrece la India con su liderazgo desde el G20 se puede aplicar además de la educación, en múltiples disciplinas de nuestro país, que no necesita más que voluntad, creatividad y capacitación para sacar provecho de esta mina virtual.

La gran pregunta es ¿están las autoridades paraguayas dispuestas a trabajar en serio en un campo que a primera vista es intangible pero que en el mediano y largo plazo podría significar la generación de colosales ingresos que aseguren el desarrollo de nuestro país?

La respuesta está por verse porque es sabido que el camino que transitan los paraguayo que trabajan en el campo de la I+D (Investigación + Desarrollo) ha sido hasta ahora sinuoso y cuesta arriba.

mescurra@abc.com.py

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