El aguinaldo es un ingreso extra que cada año muchas personas esperan con entusiasmo, al menos los trabajadores y trabajadoras que están formalizados. Es un derecho establecido en el Artículo 243° del Código Laboral Paraguayo, que establece taxativamente: “Queda establecida una remuneración anual complementaria o aguinaldo, equivalente a la doceava parte de las remuneraciones devengadas durante el año calendario a favor del trabajador en todo concepto (salario, horas extraordinarias, comisiones, u otras), la que será abonada antes del 31 de diciembre, o en el momento en que termine la relación laboral si ello ocurre antes de esa época del año”.
Asimismo, el Artículo 245° nos recuerda que “el aguinaldo es inembargable”.
Cada año en esta época, instituciones como el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS) realizan campañas sobre la obligatoriedad del pago del décimo tercer salario. Incluso, para quienes tengan dudas de cuándo deben cobrar en dicho concepto, en la web de dicha cartera se dispone de una “calculadora de aguinaldo” y también los interesados e interesadas pueden acercarse a la institución presencialmente para aclarar las dudas al respecto.
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Sin embargo, aún teniendo claro el monto que se cobrará, si no se administra adecuadamente, esta remuneración complementaria puede desaparecer “en un abrir y cerrar de ojos”, dejando pocas inversiones o ahorros.
Por eso, aquí te presentamos algunos consejos de especialistas financieros para aprovechar eficientemente el aguinaldo y mejorar la salud financiera.
Siete consejos del uso de aguinaldo
1. Planificación del gasto
Antes de tener el dinero en tus manos, realizá una planificación exhaustiva. Armá un presupuesto que contemple todas tus necesidades y deseos. Esto incluye qué tanto destinarás a regalos, deudas, ahorros e inversión. Un plan te ayudará a no gastar en exceso y te permitirá tener un balance donde priorices tus obligaciones financieras.
2. Pago de deudas
El fin de año es un excelente momento para reducir tus deudas, especialmente aquellas con altos intereses. Dedicar una parte de tu aguinaldo a disminuir tus pasivos puede brindarte alivio financiero a largo plazo, liberando ingresos mensuales que podés utilizar de otras maneras.
3. Ahorro e inversión
Reservá una parte de tu aguinaldo para el ahorro. Considerá abrir una cuenta de ahorro de alto rendimiento o invertir en algún fondo. El dinero ahorrado o invertido puede ayudarte a enfrentar futuras emergencias o a alcanzar metas a largo plazo, como la compra de una casa o financiar la educación.
4. Fondo de emergencia
Si aún no tenés un fondo de emergencia, esta es la oportunidad perfecta para comenzar a construir uno. Este fondo te protege de imprevistos, evitando que tengas que endeudarte en situaciones inesperadas. Se recomienda tener al menos tres a seis meses de tus gastos mensuales en este tipo de fondo.
5. Gastos de fin de año
Es común usar parte del aguinaldo en las celebraciones de fin de año. Aquí es vital no caer en excesos. Priorizá lo esencial y, si es posible, buscá alternativas que se ajusten a tu presupuesto. Planear con anticipación puede ayudarte a disfrutar sin comprometer tus finanzas.
6. Educación financiera
Aprovechá para informarte más sobre temas financieros. Conocer más sobre gestión financiera te permitirá tomar decisiones más informadas y maximizar el aprovechamiento de ingresos adicionales como el aguinaldo.
7. Donaciones
Si tu situación financiera lo permite, considerá hacer donaciones a causas que te importen. Muchas personas sostienen que parte del progreso personal también radica en contribuir al bienestar de los demás. Esto no solo mejora lo que se conoce como “finanzas emocionales”, sino que también tiene beneficios fiscales en algunos casos (ya que se pueden deducir las donaciones al momento de pagar los impuestos al Fisco).
Una administración inteligente
El aguinaldo, si bien es una entrada anual relevante, debe ser administrado con inteligencia, para asegurarte de que una parte de este ingreso se traduzca en beneficios significativos para tu futuro financiero. La planificación y disciplina son claves para hacer del aguinaldo un recurso verdaderamente valioso, señalan los entendidos.