Monseñor Escobar lamentó que en pleno siglo 21 hayan tantas necesidades y penurias por las que pasan los chaqueños. Reclamó un cambio radical para atraer a los inversionistas y que instalen industrias que desarrollen la región.
Como obstáculos para el desarrollo citó la falta de caminos de todo tiempo en muchas comunidades, para que las personas se puedan manejar sin estar dependiendo de las inclemencias del tiempo, o peor aún, por la desidia o descuido para su reparación por falta de presupuesto.
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Escobar dijo que en la zona se carece de un buen servicio de electricidad, esto se acentúa en los permanentes cortes, o la suba y baja de la tensión, lo que ya produjo pérdidas millonarias a varias humildes familias, que sufrieron la quema de sus electrodomésticos.
Al referirse a la Ande, indicó que se caracteriza por prestar un pésimo servicio en el departamento de Alto Paraguay. “Es por eso que exigimos a las autoridades de dicha institución la inmediata construcción de la Sub-estática, que según promesas y planificación de la misma Ande, debía construirse en este 2023 en el departamento”, recordó.
El obispo destacó que solo con caminos de todo tiempo y un buen servicio de energía eléctrica se podrá soñar en salir de este atraso del departamento. Agregó que hay otras tantas necesidades en materia del Poder judicial, la fiscalía y la seguridad.
También se refirió al rico historial del Vicariato Apostólico del Chaco Paraguayo en sus 75 años de creación, puntualizando la labor de numerosos misioneros y misioneras, que en todo este tiempo se encargaron de evangelizar a las personas de esta región.
El VACHP fue creado un 11 de marzo de 1948, por el entonces Papa Pío XII, siendo su primer obispo el salesiano uruguayo, monseñor Dr. Ángel Muzzolón. Por el Vicariato ya pasaron otros obispos, como Alejo Ovelar, Zacarías Ortiz, Edmundo Valenzuela y el actual es monseñor Gabriel Escobar, quien asumió el cargo en agosto del 2013.
Los restos de los obispos, Ángel Muzzolón y Alejo Ovelar descansan en la misma Catedral de Fuerte Olimpo, construcción considerada todo un símbolo arquitectónico de esta zona norte del Chaco.
Histórica presencia del cardenal
El cardenal Adalberto Martínez fue la ilustre visita de la comunidad. Llegó en compañía de otros obispos y sacerdotes en un avión de la Fuerza Aérea. Fue recibido por las autoridades civiles y religiosas en el mismo aeropuerto, donde el intendente Moisés Recalde le obsequió la llave de la ciudad, en homenaje a tan grata visita.
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Posteriormente fue acompañado por una caravana de automóviles hasta el local del Centro Juvenil Parroquial, donde disfrutó de un desayuno y luego participó de la conferencia sobre la historia del VACHP, dictada por el padre José Zanardini y el profesor Oscar Pineda
La misa de acción de gracias oficiada en la Catedral estuvo a cargo del cardenal y concelebrada por los obispos Gabriel Escobar, Mario Melanio Medina, Edmundo Valenzuela, Amancio Benítez, Miguel Fritz, y numerosos sacerdotes tanto de este vicariato, como otros que se llegaron para el evento.
Al término del oficio religioso, el cardenal agradeció a los presentes por la invitación y recordó su vida de infancia en los obrajes de Puerto Pinasco, donde su padre trabajaba en el área de la sanidad.
Sostuvo que en medio de la pobreza en la cual vivían, sin embargo, el techo de su humilde rancho era el símbolo de amor entre sus padres y toda la familia. En ese sentido, exhorto a los presentes a recuperar los valores dentro de la familia, “ya que es la única forma de poder desarrollarnos como persona”, sostuvo.
Mucha gente de Fuerte Olimpo y peregrinos de otras localidades participaron de la misa que presidió Martínez, cuya visita fue considerada como histórica para la comunidad.
Antes del retorno a la capital del país, Adalberto Martínez y la comitiva participaron de un almuerzo donde saborearon asado al puro estilo chaqueño.