La idea de realizar estas construcciones fue del Servicio Nacional de Saneamiento Ambiental, en el marco del consorcio por CICPA-BO, financiado por la Unión Europea/ZICOSUR.
Inicialmente la PCI implementó para el SENASA, el proyecto identificatorio de los grupos de nativos, así como tecnologías para el agua y el saneamiento en el Chaco. El resultado de esto ayudó a identificar las necesidades de cada población, para la construcción de infraestructura de acceso, potabilización y distribución del vital liquido. .
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Carlos Giesbrecht, asesor de PCI, mencionó que el objetivo es abarcar a la mayoría de las comunidades del Chaco, de los tres departamentos.
Sostuvo que en el Alto Paraguay serán beneficiadas 18 poblaciones de familias de los Ishir, Ayoreos y Maskoy. Quince de estas comunidades se ubican en la ribera del río y sus habitantes a pesar de contar con gran reserva de agua, lo consumen de manera cruda sin ningún tipo de tratamiento. Las otras 3 localidades están en el centro del Chaco y contarán con sistemas de reservorios de aljibes.
Las poblaciones de la región occidental enfrentan hace varios años los efectos del cambio climático, con sequías cíclicas y prolongadas. A esto se le suman temporadas de inundaciones que afectan notablemente las condiciones y medios de vida.
La falta de agua, tanto para el consumo como para la producción, es uno de los principales problemas, siendo las comunidades indígenas las afectadas.
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Comenzaron reuniones con nativos
Buscando potenciar este programa, se realizan reuniones con líderes indígenas de la región, denominadas: “Encuentros por el derecho al agua”.
En Fuerte Olimpo, el encuentro se realizó en la sede de la gobernación, con la participación de nativos, y los encargados del proyecto. Igual iniciativa se realizará en los otros departamentos.
Carmelo Romero, de la comunidad de los Ishir de Puerto Esperanza del distrito de Bahía Negra, dijo que poder acceder a la posibilidad de consumir agua potable, les dará una mayor calidad de vida. Dijo que en su población viven unas 280 familias, dedicadas a la cría de ganados en pequeña escala y la producción hortícola.
En Alto Paraguay viven unas 6.000 personas de las tres parcialidades. Los Ishir están ubicados en comunidades de los distritos de Fuerte Olimpo y Bahía Negra, los Ayoreos en la zona de Carmelo Peralta y los Maskoy en la región de Puerto Casado.
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