En comunicación con ABC Cardinal este jueves, Amado Díaz, intendente de la ciudad de Caazapá, comentó sobre el repentino temporal que afectó al departamento del mismo nombre la tarde de ayer, miércoles, y causó importantes daños.
Específicamente, la zona afectada fue la comunidad de Boquerón, un pueblo ubicado a unos 12 kilómetros de Caazapá, donde potentes ráfagas de viento derribaron tinglados y árboles, soltaron cables del tendido eléctrico y dañaron otras estructuras como una iglesia.
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El intendente Díaz dijo que lo repentino del fenómeno “nos sorprendió a todos”.
“Era un día caluroso, se armó un aguacero y de repente (los vecinos de Boquerón) manifestaron que fue todo muy rápido, ráfagas de viento impresionantes”, relató.
Sin víctimas
Agregó que no hubo víctimas ni heridos, solo daños materiales.
Además, el impacto de los vientos en el sistema eléctrico dejó sin energía a la comunidad de Boquerón durante “casi toda la tarde y noche”, agregó.