El Centro de Artes Visuales “Museo del Barro” expresó su enérgico rechazo al reciente cambio de nombre ad hoc de la Plaza de los Desaparecidos por el de Plaza Navidad, llevado a cabo en el marco de una acción de la Oficina de la Primera Dama.
“La Plaza de los Desaparecidos es un símbolo de la memoria ciudadana, la verdad y la justicia en Paraguay, y recuerda a las víctimas del autoritarismo y el terrorismo de Estado promovido por la dictadura stronista del Partido Colorado”, reza el documento.
Afirman que la denominación de la plaza, aunque sea de forma temporal, atenta contra el significado histórico y colectivo de este espacio que regularmente es activado por la ciudadanía como sitio de memoria, reflexión y resistencia.
“Esta acción se enmarca en una serie de actividades llevadas a cabo por la Oficina de la Primera Dama de Paraguay, instancia que, según la Ley Nacional de Cultura N° 3.051, carece por completo de atribuciones para intervenir en políticas culturales del país”, critican.
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Denuncian usurpación de roles de la Oficina de la Primera Dama
Denunciaron que tales acciones constituyen una usurpación de roles que corresponden a la Secretaría Nacional de Cultura, que está obligada a intervenir en casos como este para resguardar la integridad de un patrimonio cultural como la Plaza de los Desaparecidos, al tiempo de trivializar un sitio de memoria indispensable en la consolidación de una democracia comprometida con los Derechos Humanos.
En la plaza está la histórica obra de Carlos Colombino, denominada “Entierro de un (otro) monumento”, escultura realizada en 1996.
La obra es una escultura de Alfredo Stroessner que se encontraba en el Cerro Lambaré y que fue derribada en democracia, cortada en trozos y sepultada entre dos bloques de hormigón, sostenidos a su vez por cabos metálicos.