La fiscala de Villa Hayes, Rosa Heinroth, imputó esta noche por homicidio doloso a Sergio Daniel Ayala González, al considerarlo como uno de los sospechosos en el atroz crimen de Leidy Karina Amarilla Cabral (42), que fue vista por última vez en Caacupé el jueves 5 de diciembre y cuyo cuerpo fue hallado 5 días después en un campo de la zona de Loma Conché, distrito de Nueva Asunción, departamento de Presidente Hayes.
Para la fiscala aún no hay elementos para calificar el caso como feminicidio ya que, por el momento se carece de evidencias de que la víctima y el ahora imputado hayan tenido una relación amorosa.
Sergio Ayala fue detenido en su vivienda el martes último a las 21:50, por policías de Investigaciones, de Asunción, Cordillera y Presidente Hayes, que trabajaron en forma coordinada. De hecho, su casa está ubicada a tan solo 116 metros de donde se encontró el cadáver en descomposición de la mujer.
También quedó detenido, Sebastián Alderete (29), vecino de Ayala, como otro sospechoso de haber tenido participación en el asesinato de Leidy Amarilla. El hombre se presentó en la comisaría 5ª de la zona y sería imputado este jueves, tras brindar declaración indagatoria ante la agente del Ministerio Público.
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Tanto Ayala como Alderete serían adictos a sustancias estupefacientes.
La Policía anunció una conferencia de prensa para mañana a las 8:00 en la sede de Investigaciones.
Datos que llamaron la atención a los investigadores
De acuerdo con los datos recabados por la Policía, Leidy hace solo cuatro meses se separó de su pareja Fabricio Noguera, a quien denunció por violencia ante la Fiscalía y la Policía.
De hecho, Noguera fue imputado el martes, por el fiscal Carlos Maldonado por trasgresión a la Ley de Armas, luego de que él amenazara con un arma a uno de los cuatro hijos de Leidy.
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Fabricio fue el primer sospechoso, pero mediante averiguaciones, la Policía llegó a Sergio Ayala, un pasero a través de quien Leidy adquiría mercaderías del lado argentino y con quien, supuestamente, habría iniciado hace poco una relación. Además, otros lugareños señalaron que una mujer llegaba a su casa de vez en cuando.
Con esos datos, la policía fue hasta su casa. Ante la presencia de los investigadores se puso nervioso y exclamó que él no la mató, para luego relatar, atribuyendo la autoría de los golpes, la puñalada en el muslo y la asfixia hasta la muerte, así como el traslado hasta el campo a otro hombre, quien sería el nuevo detenido.
Llamativamente, en la casa de Ayala se encontró sangre y lo descripto por él, coincidió plenamente con lo que reveló la autopsia.
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Autopsia reveló asfixia
Según el informe del médico forense, Dr. Pablo Lemir, la muerte de Leidy Amarilla fue violenta.
“Tiene lesiones en el cuello, en el rostro, cara de lado izquierdo, nivel contusa en la frente y probablemente en el antebrazo, lesiones que pudimos determinar, pero que no cuentan con lesiones de hueso”, expuso Lemir.
“Pero la causa de muerte es una asfixia. Esto pudimos determinar a pesar de la avanzada putrefacción de los órganos internos, porque queda parte de lo que sería la sangre del edema dúo pulmón, dejando marcas de putrefacción de todo lo que es el árbol traqueobronquial”, detalló el médico.
También “hemos hallado una lesión punzante en el muslo izquierdo, con características vitales”.