Ante la gran cantidad de peregrinantes que llegan hasta el Santuario para visitar a la Virgen de Caacupé, son muchos los que aprovechan la oportunidad de ventas.
Honditas contra los chespis
Valentín Cabrera (56) es oriundo de Carapeguá y desde hace años se dedica a la fabricación de honditas y bodoques, pero según aclara “no es para utilizarlos contra las avecillas”, sino recomienda usarlo contra los chespis cuando se los sorprenden in fraganti. “Con tres bodoques que les alcancen los chespis corren y dejan tirada la ropa que intentaban robar”, dice.
Las honditas tienen distintas medidas, unas con “telescopios” (horquilla) más grandes que con las gomas le dan un alcance de 180 metros y otros de mediano tamaño que llegan a los 100 metros. Los precios oscilan entre G. 20.000 y G. 50.000. El paquete de bodoques con 25 esferas cuesta G. 5.000.
Comenta que el resto del año tiene muchos clientes en los mercados de San Lorenzo, el Mercado Central de Abasto y el Mercado 4.
Las ramitas que sirven de “telescopios” se hacen de los arbustos de sapirangy y los bodoques de una arcilla especial que consigue en la zona del Lago Ypoá.
Insistió en que se los utilice solo como divertimento o seguridad doméstica contra los chespis -dada la calidad de la goma y los proyectiles de barro- y bajo ningún punto de vista contra las aves, como ocurría en nuestra infancia. “Es para los delincuentes que quieran entrar de contramano”, afirma.
Quien quieran sus honditas pueden llamarlo al 0972 866 729.
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Refrescante tereré
No son pocos quienes aprovechan la festividad para ofrecer el refrescante tereré con poha roysa.
Dos jóvenes estudiantes de radiología del CES de Ypacaraí (Instituto Superior de Educación en Salud), Camila Giménez y Milagros Jara, ambas de 21 años, aprovechan para ofrecer tereré y bidones con la forma de la Virgen para recoger agua de Tupasy Ykuá.
Tanto el tereré como los recipientes cuestan G. 10.000 y esperan lograr buenas ventas para sus estudios. Desde hace tres días están apostados en una de las esquinas de la Plaza Teniente Fariña.
Las hierbas preferidas son las refrescantes como el agrial, tarope, uruzu he’e, koku y otras que ayudan a aplacar los efectos de la caminata. “Prestamos también nuestras jarras a los que quieran tomar por aquí nomás. Pero muchos traen sus termos para cargar”, cuentan.
Las dos jóvenes caacupeñas emprendoras trabajan el resto del año como árbitro y mototaxista, en el caso de Camila y ama de casa en el caso de Milagros.
Velas y duchas
Las ofertas en Caacupé son muy variadas y no hay límites de edad para los emprendedores, desde los niños que ofrecen las velas para ayudar a mejorar los ingresos en sus casas, hasta ancianos que ofrecen velas de sebo. El precio es de G. 5.000 el paquete de cuatro.
Ducha y baño por todos lados se observan al aproximarse a Caacupé. Los comercios y las casas particulares indican en su portón que habilitaron sus servicios para un chapuzón tras la caminata o el uso dele baño. Los costos desde G. 2.000.