En la calle 12 de Octubre, esquina Yegros, del barrio San José, un tubo de cemento que sirve de drenaje del agua de la zona, se hundió y se formó una zanja, dejando un pequeño espacio a ambos lados para el paso de los vehículos. Los vecinos repararon la zanja debido a la falta de respuesta de las autoridades municipales, pero enseguida volvió a ceder bajo el peso de los enormes camiones.
Uno de los vecinos del barrio mencionado, Juan Bautista Escobar, señaló que el intendente municipal, Derlis Molinas (ANR), está enterado del deterioro de esa calle, que la zanja formada por la rotura del tubo es un peligro, pero ni siquiera se dignó a señalizar adecuadamente. “Si ocurriera, espero que no, un accidente, la municipalidad sería pasible de una demanda judicial por omisión grave”, sostuvo el poblador.
Escobar explicó que ayer nomás una señorita que quiso cruzar a orillas de la zanja con su automóvil fue arrastrada al pozo. Los vecinos rescataron el vehículo mediante una montacargas de un negocio local.
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“No podemos cargar con tierra la zanja porque, en la primera lluvia, se formaría un desastre con la inundación de las viviendas de los vecinos”, dijo finalmente el lugareño.
El mes pasado, el intendente municipal de este distrito, Derlis Molinas, dijo que estaba al tanto del problema en esa zona, pero que no contaba con una retroexcavadora para la reparación, especialmente para la colocación del tubo. Pese a la insistencia de los vecinos, ni siquiera señalizó la zanja en medio de la calle.
Intentamos volver a consultar con el jefe comunal sobre el pedido de la gente, pero él no atendió su teléfono celular. Estamos abiertos a escuchar su versión cuando él lo crea conveniente.