Vecinos de los barrios Tablada y Virgen de Fátima claman por la urgente mudanza de los frigoríficos que operan en la zona, pues además de contaminar también son peligrosos. Esto en relación al incendio ocurrido ayer en una de estas industrias de la zona.
Ricardo Merlo, exfiscal de Medioambiente y representante legal de los vecinos de la zona, explicó que ya en el año 2014 se declaró emergencia ambiental en el lugar debido a la gran contaminación que existe desde hace años, pero aunque transcurrió una década, nada cambió.
Dijo que si bien algunos frigoríficos en apariencia ya no contaminan arrojando los desechos directamente a los arroyos y ríos de la capital, aun así los olores siguen siendo sumamente desagradables, pues existen problemas graves en cuanto al manejo de los residuos.
Ver: Video: Frigoríficos “han cumplido su ciclo” en Asunción, afirma comisión vecinal
Es por eso que los pobladores de la zona no aceptan otra opción que no sea la mudanza de los frigoríficos, curtiembres y procesadores ilegales de hueso y vísceras que están instaladas en la zona desde hace por lo menos 20 años, manifestó.
“Hasta que lamentemos alguna muerte van a seguir esperando para mudarse los frigoríficos que día a día contaminan y ponen en riesgo la vida de los pobladores de Tablada y otros tres barrios más”, expresó Merlo en su cuenta de X.
Ayer jueves se produjo un incendio en la sede del frigorífico Concepción del barrio Trinidad de Asunción. Varias unidades de bomberos trabajaron en la zona para enfriar las instalaciones tras controlar las llamas.
Plan de Franja Costera establece mudanza de frigoríficos
Actualmente en la Junta Municipal de Asunción se analiza el plan de Franja Costera, que contempla, entre otras cosas, la mudanza de los frigoríficos de la capital. El legislativo municipal plantea dar un año de tiempo (de ser aprobada la minuta) para que estas industrias dejen de operar su sección de mataderías, y que se conviertan en todo caso en centros logísticos del rubro de la carne.
Los representantes de los frigoríficos, en tanto, piden como mínimo cinco años de plazo para suspender ciertas actividades. Este planteamiento es rechazado por las organizaciones vecinales de Tablada Nueva y Virgen de Fátima.