Muchas personas en nuestro país luchan por alcanzar la verdadera inclusión en todos los ámbitos de la vida: familiar, de amigos, social y laboral, sin embargo las consecuencias de la discriminación pueden llevar a situaciones extremas e incluso de autodestrucción.
El psicólogo Osvaldo González señala que los principales efectos psicológicos de la homofobia y la transfobia en la población LGBT son:
- Ansiedad y estrés: para muchas personas LGBT en Paraguay ocultar su orientación sexual e identidad de género para evitar la discriminación provoca altos niveles de ansiedad y estrés. El miedo constante a ser descubierto puede manifestarse como síntomas físicos: problemas digestivos, dolores de cabeza y problemas para dormir. Además, las expectativas de rechazo social y familiar pueden llevar a un estado de hiperactivación en el que la persona está constantemente alerta y preocupada.
- Depresión: la falta de aceptación y el aislamiento social pueden hacer que las personas LGBT sientan una profunda tristeza y desesperación. Las personas que se sienten incapaces de ser auténticas y tienen que ocultar quiénes son pueden experimentar intensos sentimientos de soledad y desesperanza. Sin apoyo, estas personas pueden sentirse atrapadas y su depresión puede empeorar.
- Baja autoestima: la homofobia y la transfobia tienen un enorme impacto en la autoestima de las personas LGBT. Reciben mensajes negativos sobre su identidad desde temprana edad, lo que les lleva a creer que no son dignos de amor ni respeto. Esta baja autoestima puede conducir a un comportamiento autodestructivo y dificultar el tener relaciones sanas y el éxito en el lugar de trabajo.
- Pensamientos suicidas: las tasas de ideación suicida son alarmantemente altas entre las personas LGBT que enfrentan discriminación y rechazo constantes. La falta de apoyo, los altos niveles de estrés, ansiedad y depresión aumentan significativamente el riesgo de suicidio.
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“En Paraguay donde la discriminación es generalizada y la aceptación social limitada, es fundamental desarrollar programas de apoyo y promover una mayor inclusión para prevenir tales tragedias. La implementación integral de políticas y el fortalecimiento de las redes de apoyo son esenciales para abordar esta crisis”, enfatizó.
Discriminación a la comunidad LGBT
Karen Ovando es profesional de la comunicación, está casada con Leda Sostoa, quien se desempeña como diseñadora y son una de las primeras parejas de nuestro país que contrajo matrimonio hace unos 10 años.
Para Karen, la discriminación afecta profundamente en la salud mental y el autoestima de las personas, especialmente si sufren dicha discriminación desde la infancia, porque las secuelas son para toda la vida.
Agrega que esto también se refleja en la falta de oportunidades en la adultez, tanto en la sociedad como en el ámbito laboral.
“Reprimirse trae consigo no desarrollarte plenamente como persona, por un lado, y visibilizarnos y no reprimirnos nos exponen al ostracismo, la violencia familiar o social, cosas que pueden llevarte a la autodestrucción en cualquiera de sus formas”, analiza.
Iniciativas que buscan crear una sociedad más justa y respetuosa con la diversidad
Señala que aparte de las de organizaciones activistas como: Aireana, Diversxs, Panambi, It gets better, Repar, Casa diversa, la coalición TLGBI, Contrata trans py, Somosgay y otros, que luchan “cada uno a su manera” todos los días, están al tanto del proyecto de ley “Contra Toda Forma de Discriminación” que fue impulsado en el Congreso, “sin lograr aún que nos incluyan”.
Recordó además los intentos de Yren Rotela y Mariana Sepúlveda de hacer valer su cambio de nombre (identidad) en sus cédulas, que llegaron a instancias judiciales.
“A pesar de todo el trabajo de estas organizaciones y activistas el Estado siempre nos da la espalda, es por eso que se sigue trabajando, se siguen haciendo marchas, más de una al año. El trabajo y la lucha continúan”, remarcó.
Historia de vida, de lucha y de amor
“Nos conocimos con Leda hace más de 10 años, por medio de una amiga. Empezamos a salir a los pocos meses y la relación creció rápidamente, así que nos mudamos juntas e hicimos una vida de pareja como cualquier otra”, comenta.
Recuerda que al mismo tiempo comenzaron a activar políticamente en algunos espacios, tanto físicos como en redes sociales, lo que les generó represalias y respuestas negativas de parte de sus seguidores y conocidos.
“Después de un tiempo hablamos de la idea de casarnos y al hacerse todo tan público, ya que la noticia salió en varios medios, los ataques fueron peores. Para ese entonces yo ya estaba trabajando en otra radio, en la cual solo duré dos años porque creo que mi figura militante no atraía el enfoque más comercial y oficialista (conservador) que estaban tomando”, manifiesta.
Asegura que la decisión de casarse fue tanto romántica como política, que luego de ese gran paso se consolidaron aún más como pareja y como profesionales por lo que comenzaron a trabajar juntas en proyectos laborales.
En la actualidad no sólo son pareja, también son socias comerciales y compañeras de trabajo, llevando adelante una radio online.