El Tribunal de Sentencia, presidido por la jueza Digna Ocampos y miembros Oscar Villalba y Clara Isasi, en juicio oral y publico, declaró culpable de la comisión del hecho punible de homicidio doloso a Pintos Marecos, por el asesinato de su cuñado Enrique Arnaldo Benítez Lombardo (64).
La tragedia que ocurrió en la compañía Yarigua’a, de Sapucái, ubicada a 25 kilómetros del casco urbano, fue por diferencias que venía teniendo entre familiares por cuestiones de tierra. El hecho se había registrado en fecha 11 de febrero del 2018.
La familia de la víctima se encontraba reunida en la vivienda, momento que llegó al lugar el autor del hecho Pintos Marecos. El mismo con un fusil en mano y sin mediar palabra alguna comenzó a disparar contra toda la familia.
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De acuerdo a los testigos, el mismo habría realizado como unos 20 disparos de armas, que se pudo comprobar con la pericias facilitadas por el Departamento de Criminalística, explicó el fiscal interviniente de la Unidad Penal N°, Alfredo Ramos Manzur.
Uno de los disparos dio en la cabeza de la víctima quien falleció en el lugar, mientras que los demás familiares había huido en casas de vecinos y otros se parapetaron detrás de los árboles y se salvaron como pudieron.
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En su alegato final, el agente fiscal Ramos Manzur, señaló que el acusado al momento de la comisión del hecho se encontraba en pleno uso de sus facultades mentales. Además, comprendía el alcance de su actuar y aún así optó por comportarse conforme a ese conocimiento, lesionando de esta manera el derecho a la vida.
El fiscal espera que este hecho quede firme y el procesado pague la condena que le impuso ayer el Tribunal de Sentencia. El Ministerio Público solicitó 24 años de cárcel pero el colegiado dispuso 22 años, que de igual manera el agente público está conforme, porque se logró la condena al único autor del hecho.