Cristian Colmán, (34) oriundo del barrio General Diaz de Caacupé, inició como chipero en la época del colegio.
Relató que se siente muy orgulloso de su labor porque cuando nació su primer hijo ya pudo solventar los gastos con la venta de chipa.
Indicó que gracias a sus padres Merardo Colmán e Isabel Lugo ha aprendido todo sobre como trabajar en la elaboración y venta del alimento nacional.
Desde muy joven se independizó con su señora Delia Bernal, con quien formó su familia y hoy en día tienen 5 hijos, a los cuales mantienen con su trabajo. Sus hijos son Misael, Elder, Gimena, Génesis y Jordan.
El chipero mencionó que con las ventas que realizan con su familia tratan de construir un mejor futuro para sus hijos, pagando sus estudios e instándoles que hay que laburar honradamente.
“Hace 16 años que estoy en este rubro y todo lo que sé, lo agradezco a mis padres que siempre me impulsaron para lograr mis objetivos”, destacó.
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La pandemia fue una prueba muy grande
Colmán también recordó la época de pandemia. Un 4 de diciembre del 2020 salió a las calles en búsqueda de clientes, con la esperanza de vender su chipa, pero la ciudad estaba completamente vacía y no pudo vender nada.
“Es algo que nunca me voy a olvidar, fue una prueba muy grande. Todos teníamos miedo de enfermarnos, nadie quería salir a la calle, pero yo tuve que salir porque tenía que llevar el pan a mi hogar”, señaló.
“Para nosotros los chiperos la festividad mariana es una de las fechas en que hacemos nuestro aguinaldo por la cantidad de gente que acude a la capital espiritual. Pero ese 2020 fue el año más difícil de nuestra vida”, dijo emocionado Colmán.
Esa fecha se viralizó un video de Cristian, recorriendo Caacupé y gritando con impotencia buscando clientes en la calle: “Pemanombama pio”.
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El chipero caacupeño fue reconocido por muchos desde aquella fecha, ya que pese al problema que había en ese entonces, él no se rindió y salió a buscar dinero para poder alimentar a su familia.
Colmán remarcó que pasaron 4 años y no puede creer que hoy todo sea un recuerdo. Agradeció a todas las personas que siempre lo apoyan y dijo que todos deben sentirse orgullosos de lo que sus padres les hereda para seguir adelante.
“Tenemos que ser agradecidos con nuestra familia. Y los que ya somos padres debemos de ser un buen ejemplo para que nuestros hijos sean felices y se conviertan en buenos adultos”, puntualizó.