En el departamento del Vicepresidente de la República, Pedro Alliana, miles de familias se encuentran bajo agua aguardando la asistencia humanitaria. Las lluvias continuas agravan la situación, dificultando el acceso y empeorando las condiciones de las casas ya inundadas.
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A pesar de las necesidades urgentes, la asistencia humanitaria no ha llegado a estas zonas dejando a los residentes en una situación vulnerable y sin recursos. Los pobladores ya han perdido todos sus cultivos agrícolas como batata, mandioca, porotos entre otros rubros de autoconsumo, a esto se suma la falta de terreno alto para el ordeñe de las vacas que también constituye otro sustento en la vida diaria de las familias la producción de leche y queso.
Los animales domésticos como gallinas, patos, cerdos, ovejas también requieren de un lugar alto para salvarse de las inundaciones repentinas.
Los pobladores de Estero Cambá, distrito de San Juan de Ñeembucú, señalan que hasta ahora ninguna autoridad fue a visitarlos y ver la situación y hasta sospechan que fueron castigados por haberse manifestado meses atrás para exigir camino de todo tiempo.
Los pobladores de Valle Apu’a, distrito de Pilar, reclaman a las autoridades que se abran las compuertas de las dos estaciones de bombeos construidas sobre el arroyo Ñeembucú en el marco de las obras de la defensa costera de la ciudad de Pilar.
Consideran que ese es el problema que funciona como un cuello de botella y que no permite que el agua corra hacia el río Paraguay.
Marcos Pérez, poblador de Valle Apu’a indicó que las compuertas de la estación de bombeo deben ser abiertas o agrandar en todo caso para que el agua corra " Esa compuerta debe ser abierta o ampliar, es muy chico, el agua no corre y eso nos inunda, nunca nos hemos inundado y desde que se hizo esa represa estamos así” indicó.
Por su parte José Cardozo, olero de la zona también coincidió en señalar que la culpa de la inundación es la construcción de la estación de bombeo en las compuertas sobre el arroyo Ñeembucú.
“Nunca nos hemos inundado siempre llovió en grandes cantidades pero el agua siempre corrió hacia el arroyo Ñeembucú, ahora no corre, ese canal de derivación que hicieron no sirve, en vez de correr el agua hacia el río el agua viene hacia nosotros” explicó.
El pronóstico no es nada alentador en la zona, los cultivos agrícolas ya se perdieron por completo en la zona por lo tanto aguardan la asistencia alimentaria. A pesar de que el ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) Arsenio Zárate, se comprometió que en la fecha llegaría los kits de alimentos esto se retrasa.
Los afectados aguardan una respuesta rápida y coordinada para atender las necesidades básicas de estas comunidades afectadas.
Reacción tardía
Por otra parte, el diputado Dionel Aguilera (PLRA), criticó la reacción tardía por parte de las autoridades para iniciar la limpieza de los cauces hídricos. ”Es una desidia de las autoridades, sabíamos que esto iba a ocurrir, cuanto tiempo de sequía tuvimos y no se hizo las limpieza correspondiente, hay que ser serio en estas cosas”, señaló.
Con relación a la construcción de la estación de bombeo y el canal de derivación del arroyo Ñeembucú, el legislador indicó que ambos no fueron construidos como debe ser.
“No funciona el canal de derivación y tampoco las compuertas de las estación de bombeo; tienen la boca muy chica y eso imposibilita que el agua corra rápidamente hacia el río Paraguay”, indicó.