En comunicación con ABC Cardinal este jueves, el ministro del Ambiente, Rolando de Barros, comentó que está en marcha el proceso de verificación de las circunstancias que causaron la fuga de amoníaco registrada el miércoles en la fábrica de la empresa de embutidos Ochsi en San Lorenzo, que causó la muerte de una persona y dejó más de 30 heridos.
En horas de la tarde de ayer se reportó una fuga de amoníaco, presuntamente causada por una explosión en una unidad de refrigeración, en la fábrica de Ochsi, que dejó varias personas heridas e intoxicadas y obligó a un cierre de la circulación en un área de 400 metros a la redonda alrededor del edificio, ubicado en una zona residencial de San Lorenzo.
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Uno de los heridos falleció en horas de la mañana de hoy en el hospital Ingavi del Instituto de Previsión Social. Otras 32 personas siguen hospitalizadas.
“La empresa no puede deslindar responsabilidades”
El ministro Barros dijo que la fábrica de Ochsi está sujeta a protocolos especiales para el manejo de amoníaco, un gas tóxico para seres humanos que se utiliza en sistemas de refrigeración, y afirmó que los fiscalizadores del Ministerio del Ambiente están en el proceso de verificar si esos protocolos fueron o no cumplidos, además de determinar la causa exacta del suceso de ayer.
Ochsi afirma que el accidente se debió a la explosión de una garrafa de amoníaco propiedad de un “proveedor tercerizado”, que no estaba conectada ni estaba siendo manipulada en el momento en que ocurrió el incidente.
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“En el plan de gestión está estipulada la tercerización del manipuleo del gas, pero eso no significa que la empresa no deba implementar un protocolo y tomar todas las medidas de seguridad para asegurar la vida de los funcionarios y el entorno de la industria”, dijo al respecto el ministro.
“(Ochsi) no puede deslindar responsabilidades en una empresa tercerizada; la responsabilidad es mutua”, sentenció.
Detalló que Ochsi se encuentra intervenida y todas sus operaciones suspendidas hasta la determinación de la causa exacta del incidente “para sancionar ejemplarmente” a quien corresponda.
Alrededores de la fábrica siguen cerrados
Sobre la situación en los alrededores de la fábrica, donde continúa vigente un “cierre perimetral” en un área de 400 metros a la redonda, el titular del Ministerio del Ambiente dijo que un equipo está trabajando en la medición de la calidad del aire para garantizar que la zona sea segura.
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Indicó que el amoníaco es un gas muy volátil, por lo que es posible que, si el gas fugado provino solo de una garrafa, este ya se haya evaporado en su totalidad.