Los obispos, tras reunirse en la 239° Asamblea de Obispos del Paraguay, se mostraron sorprendidos por que los representantes del pueblo, conociendo la falta de recursos en salud pública y en educación, piensen solamente en autoasignarse jugosos salarios, indicaron portavoces de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP).
Monseñor Amancio Benítez, fue el portavoz del mensaje de la Asamblea de Obispos. “Nos sorprende que los representantes de este sufrido pueblo, conociendo estas necesidades se muestren tan insensibles y piensen solamente en su bienestar”, indicó Benítez, obispo de Benjamín Aceval y secretario general de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP).
Lea más: Obispos debaten realidad nacional y eclesial
La crisis es aguda, lamentaron. Vieron con mucha preocupación el descuido de la salud pública y la deuda del gobierno en materia de educación, “tan golpeada últimamente”.
Monseñor Benítez recordó que miles de niños y jóvenes están fuera del sistema educativo, tanto en instituciones católicas como en las públicas, ante la desidia gubernamental.
Obispos cuestionaron desalojos violentos en comunidades indígenas y campesinas
Durante la Asamblea, los obispos también analizaron sobre otra “preocupante realidad nacional”, los desalojos.
“Nos duelen algunos problemas, como los desalojos violentos a comunidades indígenas y campesinos, sin consideración a los más vulnerables, que son las mujeres, los niños y ancianos”, indica el mensaje.
Lea más: Inédita decisión: Papa designa a mujeres en el Dicasterio para los Obispos, una estuvo en Paraguay
Las cárceles y el hacinamiento presente en estos espacios y el narcotráfico con sus garras en la política y en la vida social de las comunidades también fueron abordados en el encuentro.