La tensa situación en la frontera se volvió una constante, principalmente en la ciudad de Encarnación, donde se extienden por kilómetros la fila de automóviles con intención de cruzar la frontera por el Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz.
Los conductores además, hacen constantes denuncias por adelantamientos indebidos, situación que se tornó habitual en la zona. Los efectivos a cargo del ordenamiento del tránsito no dan abasto para mantener la tranquilidad en la frontera. Principalmente en los horarios de ingreso y egreso escolar, donde priorizan la tarea preventiva en las instituciones públicas de la ciudad.
El subjefe de la Policía Municipal de Tránsito, Adolfo Duarte, aseguró que implementan las multas estipuladas por ordenanza municipal, pero que sólo cuando descubren en flagrancia a los conductores.
Al ser extensa el área de cobertura, los efectivos no pueden hacer cumplir la normativa de manera efectiva, aseguró el inspector. El adelantamiento indebido en la fila, está multado con cuatro jornales, según ordenanza municipal.
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Caos vehicular en la frontera y solo la mitad de casillas habilitadas
En la República Argentina, hoy y el lunes son feriados, situación que agrava el conflicto. En estas circunstancias la aduana del vecino país, sólo habilita la mitad de las casillas de atención, haciendo más lento el tránsito vecinal fronterizo.
Así también los días martes y jueves de este mes, no está disponible el servicio de tren, debido a mantenimientos en las vías. Todo contribuye a que la problemática se mantenga en el tiempo, y sea más acentuada durante las últimas semanas.
Los afectados denuncian esperas de hasta cinco horas, para poder cruzar al vecino país.
Caos vehicular en la frontera ante ventajas económicas
La devaluación constante del peso argentino, contribuye a que se generen diferencias sustanciales entre los precios de ambas márgenes del río Paraná.
El contexto alienta a que cada vez más automovilistas busquen mejores precios en comestibles y combustibles del lado argentino, aprovechando la baja de su moneda, ya sea para uso particular o con la intención de comercializar, constituyendo micro-contrabandos.
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Los extranjeros encuentran atractivo traer combustible para vender de manera irregular a nuestro país, así como también realizar compras de dólares para generar ganancias en el cambio de moneda.
Esta realidad hace que crezca el volumen del tránsito entre ambas ciudades, sobrepasando la capacidad de nuestras autoridades para mantener el orden.