El pasado 30 de agosto debió culminar el juicio oral y público que se llevó a cabo en el juzgado de Fernando de la Mora, donde es juzgado Manuel Domínguez, acusado de intentar asesinar a su esposa, María Elena Cañete, el 18 de mayo de 2020, quien en el momento del hecho se encontraba en la casa de su madre en el barrio San Isidro de la ciudad de Luque.
Esta vez la defensa presentó la sexta chicana y recusó al Tribunal de Sentencia, conformado por los jueces Liz María Ramírez, Javier Sapena y Ana Carolina Silveira. Se espera que el incidente sea resuelto rápidamente y de esta manera culmine el juicio.
Tanto la víctima, María Elena, como sus familiares y amigos, temen que ocurra un caso similar al de la joven Katia Brítez, quien fue asesinada hace una semana en Lambaré, pese a los reiterados pedidos de protección. La mujer fue arrollada varias hasta ser asesinada.
Para exigir justicia y que Manuel Domínguez sea condenado a prisión, la víctima, sus hijos, otros familiares y amigos marcharon el pasado sábado a la tarde sobre la calle Adela Speratti de este distrito, bajo el lema “Por María Elena y por las que apagaron su voz”.
María Elena había recibido un impacto de bala en el abdomen tras mantener una discusión con su esposo, quien insistía en mantener una relación con la misma. En ese entonces, la mujer se encontraba en la casa de su madre en compañía de la misma y de sus hijos. Tras el hecho fue asistida y llevada rápidamente hasta el hospital donde lograron salvar su vida.
El Ministerio Público solicitó para Domínguez la pena máxima de 30 años de prisión por intento de feminicidio. La familia de la víctima incluso asegura que reciben constantes amedrentamientos por parte de la familia del procesado y temen que ocurra lo peor en caso de que Manuel quede en libertad.
Durante la marcha pacífica, la abogada de la mujer, María Selva Rodríguez, dijo que es la sexta vez que la defensa de Domínguez presenta la chicana y agregó que el pasado 30 de agosto se debió llevar a cabo durante el juicio la declaración del acusado y de la víctima, para luego esperar la decisión final del Tribunal.
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La profesional de derecho también señaló que el Tribunal de alzada debe resolver la chicana en diez días, porque la defensa del presunto autor pretende dilatar el proceso para que prescriba.
Rodríguez dijo que el caso no avanzaba y que tuvo que solicitar por escrito al Juzgado que se fije fecha de juicio ante el temor de que prescriba la causa. Actualmente, Manuel Domínguez se encuentra recluido en la prisión de Emboscada.