El mundo sufre múltiples crisis a causa del desarrollo económico, por la pérdida de la biodiversidad en 69% en los últimos 40 años, la reducción de la capa de ozono, la acidificación de los oceános, el aumento de la contaminación química, la desaparición de bosques y otros, advirtió Cristianne Close, vicedirectora de Conservación Global, WWF Internacional (Brasil), durante su exposición en el congreso internacional de Responsabilidad Social Empresarial y Sustentabilidad, de la Asociación de Empresarios Cristianos (ADEC).
La misma expuso en la primera de las dos jornadas del citado foro, realizado en el Paseo la Galería y advirtió que unos US$ 44 billones del PIB mundial se encuentran en riesgo moderado o severo, debido a la pérdida de la naturaleza, por la duplicación de extracción de minerales, la emisiones de carbono y el cambio climático, entre otros factores.
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Por otra parte, durante uno de los talleres desarrollados en la segunda jornada, sobre el ambiental, se advirtió entre varias cosas que unos 44 de los 118 elementos de la tabla periódica están en peligro de extinción en un futuro no muy lejano; una parte de los mismos, con seria amenaza de extinción en los próximos 100 años; otra, con amenaza creciente por el aumento del uso y otra porción con riesgo de disponibilidad limitada de suministro.
En contrapartida, diferentes expositores apuntaron sus disertaciones hacia la búsqueda de la transformación de la cultura y de los patrones de la producción y el consumo.
Igualmente, algunos de los expertos invitaron a los representantes empresariales a cambiar la forma de tomar decisiones para impulsar una transición hacia los modelos de producción regenerativos, a la economía circular, hacia las soluciones basadas en la naturaleza y a la reducción de la conversión de los ambientes naturales.
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En ese sentido, quien abrió el congreso de la ADEC, el embajador de la Unión Europea (UE) , Javier García de Viedma, manifestó que para avanzar en sustentabilidad se debe cambiar el modelo de desarrollo económico, mediante la economía circular y la producción en un ámbito neutro en emisiones de gases “GEI”.
Por su parte, Matteo Sirtori, jefe de cooperación de la Delegación de la Unión Europea en Paraguay, indicó que las inversiones públicas no son suficientes para alcanzar la sostenibilidad, más aún en la situación de emergencia climática que vivimos. Agregó que las inversiones privadas son fundamentales y que desde la Unión Europea están promoviéndolas para generar un desarrollo que sea respetuoso con el medio ambiente.
También participó desde la distancia, mediante la tecnología, Isabel Roser, especialista en sostenibilidad, Senior ESG de Advisor, quien instó a los participantes a ser agentes de cambio, para la transición de una cultura de un ámbito degenerativo hacia uno regenerativo.
A su vez, la presidenta de la ADEC, Gloria Ayala Person, afirmó que los líderes y referentes empresariales participantes en el foro están unidos en un compromiso compartido para formar un futuro más sostenible, responsable e íntegro para las empresas y la sociedad.
Inteligencia Artificial: ¿Tensa calma u oportunidad?
La revolución tecnológica histórica que se denomina Inteligencia Artificial (IA) fue abordada en el contexto de la realidad empresarial, en el marco del Congreso RSE de la ADEC, realizado el jueves y viernes de la semana que pasó, en el Paseo La Galería. Los expertos en el tema, Jorge Figueredo, consultor de Tecnología; Freddy Fernández, gerente de talento humano y desarrollo organizacional, de Perfecta Automotores; y Juan Manuel Teixidó, CEO de Teixidó, presentaron sus visiones sobre el tema, en un panel que quedó muy corto.
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Jorge Figueredo manifestó que la Inteligencia Artificial es una oportunidad y puede ser una herramienta poderosa para la transformación positiva de las empresas y la sociedad en general. Pero aclaró que la ética y la sostenibilidad deberán ser los cimientos sobre los que debe basarse lo que se considera como una “revolución tecnológica”.
A su turno, Juan Manuel Teixidó advirtió que los cambios que causaría la Inteligencia Artificial podrían ser desproporcionadas para la vida humana, si no prima la responsabilidad y la ética. Resumió su visión como una “tensa calma” antes de la tormenta, por que según dijo, el 10% de los ingenieros que trabajan con la generación de la IA creen que dicha tecnología podrá causar la desaparición de la raza humana. A su vez, Freddy Fernández instó a no temer a la IA.