“Nosotros postergamos la pausa que debía arrancar el 1 de junio, a pedido de la Unión de Gremios de la Producción porque la siembra de soja zafriña se retrasó. La resolución es bien clara y dice que a partir de la fecha del inicio de la pausa, ya no debe haber soja en el campo, y si el Senave a partir de sus controles identifica que hay lugares donde aun tienen, deben ser desecadas y cosechada, y esto incluye la presencia de la soja guacha o soja que pueda salir entre el trigo”, explicó.
“Hay sanciones que están previstas en la Ley 2459, pero para eso tiene que pasar por un proceso jurídico del Senave, en realidad hoy no debería haber soja en el campo. El objetivo de la pausa fitosanitaria es que haya 50 días sin soja en campo, para evitar que el hongo de la roya pueda sobrevivir para cuando se venga la siguiente zafra”, confirmó.