El estado de la pequeña de 13 años que recibió una bala perdida en la cabeza tuvo un pequeño estancamiento, según lo que explicó el doctor Elías Rolón, director médico del Hospital Central del Instituto de Previsión Social (IPS), luego del desplazamiento del proyectil que fuera detectado el día de ayer.
El doctor explicó que esa “migración” fue hacia el cerebelo, lo que empeoró el edema. Ante esta situación, los médicos se plantearon una cirugía para descomprimir el cerebro, aunque la tomografía de anoche mostró que, a pesar de que no hubo muchos cambios, su cuadro no empeoró.
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El doctor Elías Rolón explicó que la paciente sigue estable pero con pronóstico reservado y en coma inducido. Explicó también que la última tomografía mostró un leve descenso del edema, pero que la evolución se ha ralentizado por ese desplazamiento de la bala.
Rolón explicó que el temor es que cuando hay un edema cerca del tronco cerebral puede hacer lo que se llama un “enclavamiento”, lo que provocaría una muerte instantánea y eso es lo que quieren evitar con la cirugía, pero esta quedará en expectativa ante una nueva tomografía que sería realizada hoy.