¿Qué hacer si encontramos una serpiente en la casa?

Desde el departamento de Fauna Silvestre del Ministerio del Ambiente (Mades) explican que las altas temperaturas propician que las serpientes salgan de sus guaridas, por lo que es importante tomar los recaudos correspondientes. Exhortan a no matar a estos animales.

El jefe de Fauna Silvestre del Mades, Ivan Mareco, explica que las serpientes atacan únicamente cuando se sienten en peligro.gentileza
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El intenso calor propicia que varias especies animales, como las serpientes, salgan de sus guaridas, según el jefe de Fauna Silvestre del Ministerio del Ambiente, Iván Mareco, quien instó a tomar medidas de prevención.

Mareco enfatizó que especies como la jarara pueden aparecer en zonas urbanas periféricas por falta de limpieza, ya sea en baldíos o pequeños bosques, por lo que incluso podría ingresar a los domicilios. El profesional exhortó a las personas a no matar a las serpientes.

“Hay que evitar atacarlas si hay un avistamiento. La jarará es una de las especies más mansas”, añadió Mareco. Sin embargo, explicó que ellas atacan, como cualquier otro animal, cuando se sienten amenazadas.

El funcionario del Mades recomendó alejarse de las serpientes y, en caso de estar en una vivienda o un espacio público concurrido, llamar al 132, línea de los Bomberos Voluntarios, o al (021) 287 9000 del Mades.

Mareco comentó que, hoy en día, también están los grupos de rescate de fauna que hacen el apoyo.

Según el profesional del Mades, las especies más venenosas son la coral, cáscavel y la jarará.

¿Qué se hace tras el rescate de una serpiente?

El representante del Mades refirió que las serpientes rescatadas deben volver a su hábitat natural pero alejados de los humanos. “Se los deposita en áreas cercanas de donde se les encontró. No podemos llevarle al zoológico o a una unidad de rescate”, afirmó Mareco.

¿Cuáles son las especies más venenosas?

Según el jefe de Fauna Silvestre del Mades, existen tres especies consideradas como venenosas en el país y son: la serpiente de coral, la cáscavel y la Jarara. La primera es la más venenosa, dijo y, la última, se divide en siete variedades más, que varía en cuanto a letalidad.

Mareco recordó a la serpiente conocida como “mboi hovy”, que es muy común entre las pasturas. Dijo que esta especie también es ponzoñosa pero que la cantidad que inocula generalmente solo afecta a animales pequeños de los que se alimenta.

Respecto a la mordida de una serpiente, el funcionario del Mades sostuvo que el efecto del veneno puede ser variable y, la atención inmediata es importante. Indicó que la aplicación de suero antiofídico puede evitar muertes.

Asimismo, explicó que el efecto de la morderura varía con respecto al tamaño del animal y el peso de su víctima, así como el periodo de atención en un centro asistencial.

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