La tomografía por emisión de positrones o pet scan es un estudio imagenológico diagnóstico que utiliza sustancias radioactivas, llamadas radiofármacos o marcadores. En Paraguay, a nivel público, el Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud (IICS) de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) es el único establecimiento que brinda este examen médico.
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Pese a ser público, el costo del estudio es de G. 1.800.000, monto que es rechazado por los pacientes, que critican el elevado costo. Los usuarios cuestionan además la ubicación del equipo, ya que dicen que estaría mejor y sería de más utilidad en el Instituto Nacional del Cáncer (Incan).
El ingeniero Pedro Galván, jefe de Ingeniería Biomédica del IICS, explicó a ABC que el monto solicitado a quienes requieren el citado estudio es el “precio hospitalario” del mismo. Según dijo, necesitan un millón de dólares como presupuesto anual para que el servicio sea gratis.
Galván refirió además que aunque el monto parezca elevado, es el precio mínimo, considerando que el radiofármaco aplicado al paciente para la realización del examen, cuesta US$ 700 por frasco.
“No tenemos presupuesto. Lo poco que nos dan tenemos que hacer rendir. Para lograr la gratuidad, un ideal sería un millón de dólares (como presupuesto) por año, que no es nada para un país”, sostuvo.
60% de descuento en estudio de alta complejidad
Según mencionó el ingeniero, hasta que la UNA no disponga de ese monto es imposible para el IICS brindar el estudio de pet scan de manera gratuita. Refirió, sin embargo, que el precio actual tiene un 60% de descuento.
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“Gracias a las gestiones que realizó el IICS-UNA logramos bajar a ese costo. El radiofármaco utilizado ronda los US$ 700. Ese costo por la compra de multidosis, es decir, un mínimo de 8 viales (frascos). Si compramos menos, el costo del radiofármaco supera los US$ 1.000”, dijo.
Radiofármaco tiene vida útil limitada
Galván detalló que este radiofármaco tiene una vida útil de 109,77 minutos, es decir, un poco más de una hora y media, desde su salida del laboratorio que se encuentra en el centro de Asunción, hasta su aplicación en el Campus de la UNA, en San Lorenzo. Indicó que conforme pasa el tiempo, la potencia del radiofármaco disminuye en un 50% y así, sucesivamente, hasta decaer totalmente su efectividad.
“Indicar el estudio solo en los casos necesarios y organizar a los grupos de personas de acuerdo a las necesidades de cada caso respetando ese tiempo, son aspectos fundamentales para alcanzar a la mayor cantidad posible de pacientes que requieren este equipo de alta complejidad”, dijo.
Cuestionada ubicación del pet scan
Sobre la ubicación del equipo médico, que se encuentra en el Campus de la UNA en San Lorenzo, Galván explicó que fue instalado en el edificio del IICS porque se trató de una donación realizada en el marco de la presentación de diversos proyectos científicos por parte los expertos en medicina nuclear que son parte del Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Salud.
“Nosotros somos pioneros en la medicina nuclear. El Organismo Internacional de Energía Atómica que apoya estas iniciativas nos pide presentar proyectos. Evalúa los mismos y premia con estos equipos”, dijo.
El ingeniero precisó que el equipo médico consta de tres partes que fueron adquirida gradualmente.
Indicó que en un primer momento, en el 2016, se compró el SPECT, con un costo de alrededor de 400.000 euros. Posteriormente, en el 2018, se sumó el componente CT, con un costo aproximado de 300.000 euros; y finalmente, se completó el equipo con el componente PET en el año 2021, con una inversión de alrededor de 600.000 euros.